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La situación que se vive en el estado Zulia con respecto a las extorsiones es dramática. Agentes de seguridad del Estado realizaron un operativo especial para dar con los delincuentes que dispararon contra ciudadanos que se encontraban en dos establecimientos comerciales de Maracaibo. 

En menos de una semana se registraron tres ataques a comercios en el estado petrolero venezolano. Una persona murió y los hechos dejaron casi una decena de personas heridas. Por la acción tres personas fueron detenidas e identificaron a siete. 

Pero estos ataques a comercios no son nuevos en el Zulia; anteriormente organizaciones como el Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV) han advertido sobre esta situación y la Federación de Cámaras de Comercio y Producción (Fedecamaras) seccional Zulia, en 2020 registró 40 ataques a comercios por la negativa de algunos comerciantes a pagar a los extorsionadores. 

Qué se sabe de los ataques armados y con explosivos en el Zulia

Odalis Caldera, abogada, excomisaria cdel Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y que además fungió como secretaria de Seguridad y Orden Público del estado Zulia entre los años 2008 y 2012, explica en una entrevista con Efecto Cocuyo que si una persona es víctima de extorsión es importante que realice la denuncia. 

“El miedo y la ansiedad arropan a la víctima y muchas veces no formulan la denuncia  porque creen en todo lo que el delincuente le dice y eso hace que el delito incremente. Al pagar financias al delincuente para que compre armas y drogas”, explica la exfuncionaria de la policía científica. 

La extorsión es un delito que se ha venido incrementando en Zulia, pero muchos de los comerciantes evitan hacer las denuncias por miedo a que los delincuentes tomen represalias o porque no tienen confianza suficiente en las autoridades. 

Mientras que la llamada vacuna es un tipo de extorsión que se da cuando alguien es extorsionado y debe pagar una cuota mensual a los delincuentes.

“Lo llaman y le dicen que lo van a proteger y tiene que pagar mensual, está comprobado que el que paga una vez con toda certeza le van a tocar la puerta nuevamente”, explica. 

Durante 2022 el OVV registró 12 ataques con granadas en la región zuliana, en los municipios Maracaibo (6), Lagunillas (3), Cabimas (2) y San Francisco (1). En lo que va del año 2023 el OVV contabiliza cuatro atentados ligados a las extorsiones, en el informe no se incluyen los últimos tres registrados entre el 17 y 24 de febrero. 

En incremento

Caldera señala que durante su gestión como secretaria de Seguridad y Orden Público en Zulia la extorsión era un delito que se logró disminuir, pero que desde el año 2013 en adelante este tipo de violencia se fue incrementando no solo en Zulia sino en otras regiones de Venezuela. 

Explica que los delincuentes amenazaban por teléfono a las posibles víctimas. 

“Del 2013 para acá comenzaron a lanzar granadas contra clínicas, comercios, contra sedes policiales y de la GNB, se incrementó la violencia, ya no les importa que haya personas dentro de los locales, lo hacen a plena luz del día”, dice. 

Alias “El Yiyi y “El Caracas” se atribuyen los atentados contra comercios en Maracaibo, asegura Saab

Para la experta en seguridad ciudadana, es importante recalcar que la extorsión es un delito que debe denunciarse, ya que a través del Cicpc hay un nivel profesional para tratar este delito, como por ejemplo la División contra Extorsión del organismo policial.

Caldera agrega que cuando  la persona recibe la primera llamada debe formular la denuncia, para hacer las investigaciones y posteriormente notificar a la Fiscalía.

“Se tiene que agilizar cuando se trata de extorsión, y que se proceda de inmediato para evitar que se llegue a consecuencia como lo que sucedió en Zulia”, agrega. 

Cómo se da la extorsión en un estado como el Zulia

Al ser el Zulia un estado fronterizo, que limita con Colombia, y por sus condiciones geográficas, en muchas ocasiones estas situaciones hacen que los delincuentes tengan más facilidad de huir del lugar. 

“Hay una incidencia y la conocimos en los estados fronterizos, principalmente en Zulia y Táchira y se ha propagado en todo el país, como lo es la extorsión”, dice la comisaria. El combate de este delito ha provocado enfrentamientos entre autoridades y delincuentes que ha dejado algunas bajas. 

Caldera  añade que el tipo de extorsión se da porque los delincuentes se pasan información de quién es el dueño de los comercios, fincas, centro de salud y otros. Chequean la cantidad de personas que acuden a estos centros y se dan cuenta que son productivos.

“No solo es el comerciante, es el ganadero, el productor, el médico, los médicos también han sido amenazados , todo lo que signifique producción”, dice Caldera. 

Pero este delito no solo se comete en el Zulia, la comisaria señala que en otros estados del país, incluso Caracas, se han visto como los extorsionadores usan armas largas o granadas para amedrentar. 

Cómo acabar con este delito

Caldera indica que cuando estuvo a cargo de la Secretaría de Seguridad en Zulia, uno de los delitos que más le preocupaba a los expertos en seguridad era el secuestro, fue por eso que crearon una línea telefónica en la que las personas podían hacer sus denuncias anónimas las 24 horas del día. 

La creación de esta línea y el compromiso de las autoridades en resolver los casos hizo que los ciudadanos y las autoridades entrarán en contacto directo con confianza. 

“Las personas empezaron a pasar información, no solo de secuestro sino también de otros delitos, fue una fuente de información importante y se empezaron a resolver algunos casos”. 

Para ayudar a acabar con este tipo de delitos la experta recomienda la creación de una línea telefónica que de respuesta y genere credibilidad en la población. Pero que también deben tener las unidades y equipos correspondientes para atender estas denuncias y que los funcionarios puedan dar respuesta oportuna. 

La experta en temas de seguridad indica que es importante atender los casos denunciados ya que la víctima siempre tiene que ser protegida. Caldera señala que en la medida que se les atienda genera mayor credibilidad en la autoridad y por ende más personas que sean víctimas de este delito lo denuncian. 

Señala que se le debe explicar el por qué no deben pagar extorsiones, que no deben publicar en redes sociales para evitar ser víctima. 

Caldera cree que las autoridades deben actuar como lo hicieron con los últimos casos de extorsión, donde una persona resultó muerta. “Ese actuar es el que debe mantenerse en el tiempo, no solo por la extorsión sino también con otros delitos. Se debe mantener en el tiempo el actuar y proyectar las medidas de prevención para evitar ser víctimas de estos delitos”, dice. 

La exfuncionaria sugiere al Estado que se mantenga una voluntad para acabar con este delito y que esta voluntad se mantenga en el tiempo. Explica que los grupos contra extorsión de los diferentes cuerpos de seguridad del país deberían hacer frente a estas situaciones y que el Estado debería seguir dotando a los equipos, específicamente a los especializados como los del Cicpc.