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Ronny Rodríguez Rosas | @ronnyrodriguez
Foto por Mairet Chourio | @mairetchourioUna tercera ronda del llamado Diálogo Social comenzará este lunes 30 de enero entre la Organización Internacional del Trabajo (OIT), representantes del gobierno de Nicolás Maduro, de empresarios y sindicatos de trabajadores.
Esta ronda se produce en medio de la intensificación de las protestas de los gremios de educación, empleados públicos y sindicatos que reclaman un ajuste salarial digno, ante los menos de 6 dólares que vale el ingreso mínimo mensual en Venezuela desde marzo de 2022.
Este domingo, una de las más antiguas agrupaciones sindicales, la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) señaló que el gobierno incumple el 90 % de las recomendaciones que la OIT presentó a Miraflores en el año de 2019.
«La reunión de diálogo social es la tercera que ocurre desde marzo de 2022. Los resultados de las dos previas son insuficientes, pues en ninguno de los temas ha habido real voluntad del Gobierno venezolano de avanzar en una agenda consensuada para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora», dijo la CTV en un comunicado.
La OIT recomendó al gobierno hace casi cuatro años que se lograra un ajuste salarial por consenso con empleadores y trabajadores, se respetara la libertad sindical, el derecho a la asociación y se frenera la persecución a los dirigentes que reclaman mejoras laborales.
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Sin embargo, desde julio de 2022 detuvieron a Alcides Bracho, Gabriel Blanco, Néstor Astudillo, Alonso Meléndez, Emilio Negrín y Reynaldo Cortés, quienes se encuentran privados de libertad y son juzgados por su actividad sindical.
“Hemos ido a la Fiscalía, a la Defensoría del Pueblo y al TSJ exigiendo la libertad. Y la estamos exigiendo porque no hay elementos probatorios en su contra, no hay prueba alguna que condene y que los sigan deteniendo a ellos de manera injusta”, aseguró en septiembre, Diannet Blanco, esposa de Gabriel Blanco, trabajador humanitario, a quien apresaron el 7 de julio.
A inicios de mes, después de jornadas de protestas de los trabajadores de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) en el estado Bolívar, al menos a10 de ellos los apresaron. Ante las protestas, las autoridades los liberaron y acordaron instalar mesas de diálogo con los representantes de las empresas básicas, pero sólo se reunieron el 24 de enero.
Esta tercera ronda del diálogo social se producirá lejos de Caracas, en Nueva Esparta, con la presencia de representantes laborales que denuncian son afines a la gestión chavista.
Los trabajadores reclamaron en septiembre de 2022 la inclusión de las centrales sindicales Unéte, Codesa y Cutv, pero para esta nueva reunión en la isla de Margarita las volvieron a excluir.
«Aquí no hay avance en salario mínimo, en libertad sindical; por el contrario hay más presos políticos», dijo este domingo el abogado y uno de los defensores de los seis detenidos el año pasado, Eduardo Torres.
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Una tercera ronda del llamado Diálogo Social comenzará este lunes 30 de enero entre la Organización Internacional del Trabajo (OIT), representantes del gobierno de Nicolás Maduro, de empresarios y sindicatos de trabajadores.
Esta ronda se produce en medio de la intensificación de las protestas de los gremios de educación, empleados públicos y sindicatos que reclaman un ajuste salarial digno, ante los menos de 6 dólares que vale el ingreso mínimo mensual en Venezuela desde marzo de 2022.
Este domingo, una de las más antiguas agrupaciones sindicales, la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) señaló que el gobierno incumple el 90 % de las recomendaciones que la OIT presentó a Miraflores en el año de 2019.
«La reunión de diálogo social es la tercera que ocurre desde marzo de 2022. Los resultados de las dos previas son insuficientes, pues en ninguno de los temas ha habido real voluntad del Gobierno venezolano de avanzar en una agenda consensuada para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora», dijo la CTV en un comunicado.
La OIT recomendó al gobierno hace casi cuatro años que se lograra un ajuste salarial por consenso con empleadores y trabajadores, se respetara la libertad sindical, el derecho a la asociación y se frenera la persecución a los dirigentes que reclaman mejoras laborales.
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Sin embargo, desde julio de 2022 detuvieron a Alcides Bracho, Gabriel Blanco, Néstor Astudillo, Alonso Meléndez, Emilio Negrín y Reynaldo Cortés, quienes se encuentran privados de libertad y son juzgados por su actividad sindical.
“Hemos ido a la Fiscalía, a la Defensoría del Pueblo y al TSJ exigiendo la libertad. Y la estamos exigiendo porque no hay elementos probatorios en su contra, no hay prueba alguna que condene y que los sigan deteniendo a ellos de manera injusta”, aseguró en septiembre, Diannet Blanco, esposa de Gabriel Blanco, trabajador humanitario, a quien apresaron el 7 de julio.
A inicios de mes, después de jornadas de protestas de los trabajadores de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) en el estado Bolívar, al menos a10 de ellos los apresaron. Ante las protestas, las autoridades los liberaron y acordaron instalar mesas de diálogo con los representantes de las empresas básicas, pero sólo se reunieron el 24 de enero.
Esta tercera ronda del diálogo social se producirá lejos de Caracas, en Nueva Esparta, con la presencia de representantes laborales que denuncian son afines a la gestión chavista.
Los trabajadores reclamaron en septiembre de 2022 la inclusión de las centrales sindicales Unéte, Codesa y Cutv, pero para esta nueva reunión en la isla de Margarita las volvieron a excluir.
«Aquí no hay avance en salario mínimo, en libertad sindical; por el contrario hay más presos políticos», dijo este domingo el abogado y uno de los defensores de los seis detenidos el año pasado, Eduardo Torres.