Venezuela reinició clases el 8 de enero con las mismas fallas que en 2023: deserción escolar y docente, escuelas en ruinas y maestros en las calles exigiendo un sueldo digno. El panorama preocupa a las familias y, en general, a la sociedad civil, que advierte que los problemas del sistema educativo podrían empeorar para 2024.
Los últimos informes de la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) han denunciado las consecuencias de la crisis educativa e incluso el Ministerio de Educación llegó a admitir que el desempeño de los estudiantes se ha visto afectado.
En el territorio nacional, la mayoría de los jóvenes no logra completar ejercicios básicos en áreas fundamentales y falla en actividades que requieren una mínima comprensión lectora.
Dos informes sobre el tema fueron reveladores a finales de 2023: el balance anual del Sistema de Evaluación de Conocimientos en Línea (Secel) de la Ucab y los resultados preliminares de la Planes (Prueba sobre Logros de Aprendizaje Nacional a Estudiantes) realizada por el Observatorio de la Calidad Educativa Venezolana, adscrito al Ministerio.
El 11 de diciembre, la ministra de Educación de Venezuela, Yelitze Santaella, participó en un foro organizado en la Ucab, donde se presentaron y analizaron los estudios que muestran el grave retraso formativo de los alumnos de primaria y educación media en el país. El evento forma parte de las iniciativas de la universidad por establecer alianzas con distintos sectores para atender la situación en las instituciones públicas.
Qué evaluó el Ministerio
En 2022, había 8.763.066 estudiantes inscritos en el territorio nacional, según el Plan Victoria Bicentenario, un documento publicado por el Ministerio para la Comunicación y la Información. Posteriormente, Santaella indicó en entrevista para el canal del Estado que hay por lo menos 29.103 centros educativos en el país.
En 2023 los investigadores del Observatorio Nacional por la Calidad Educativa establecieron un marco muestral de 13.308 escuelas y 834.546 estudiantes de tercero y sexto grado para evaluar los conocimientos de los niños con el sistema Planes. No obstante, para un primer estudio se tomaron en cuenta solo 593 escuelas a nivel nacional.
Los datos resultantes preliminares, con fecha de octubre de 2023, fueron presentados por Lenín Romero, coordinador del observatorio. El Ministerio de Educación se enfocó en dos áreas fundamentales para cualquier estudiante de primaria: matemáticas y lectura.
Gremios docentes ya habían reportado meses antes que los alumnos venezolanos estaban fallando estrepitosamente en ambos campos. De hecho, un estudio llevado a cabo por la Dirección de Investigación y Estadísticas Educativas de la Fundación para el Desarrollo Integral del Docente (Fudeind) en abril de 2023 indicó que 90 % de estudiantes de sexto grado no respondió correctamente en las áreas de Castellano, Matemática o Ciencias.
Raspados en matemáticas
Uno de los puntos en los que coincide el informe Secel de la Ucab y el preliminar del Ministerio de Educación es que en las escuelas hay graves fallas en el área de matemática.
De acuerdo con el Observatorio Nacional por la Calidad Educativa, 71 % de los estudiantes de tercer grado y 98,8 % de los alumnos de 6to grado evaluados mostró un desempeño deficiente, del nivel I, considerado el más bajo.
En el sistema utilizado, el nivel II corresponde al nivel básico de conocimiento de la materia, el nivel III al conocimiento intermedio y, finalmente, el nivel IV es el más avanzado.
Por otro lado, el Secel 2023 arrojó que los estudiantes de 6to grado de centros públicos tienen un promedio de 7,47 puntos sobre 20. Lo que quiere decir que mayormente están desaprobados en la asignatura.
El estudio de la Ucab indica que, en el caso de secundaria, los peores calificados son estudiantes de quinto año, quienes obtuvieron en promedio 5,61 puntos sobre 20. Mientras tanto, estudiantes de primer año obtuvieron 6,75 puntos. En el bachillerato, el grado con la calificación más alta fue cuarto año, con un puntaje de 7,53 sobre 20.
El Ministerio de Educación no ofreció cifras sobre educación media o secundaria que puedan contrastarse con los resultados obtenidos por la universidad.
Poca comprensión lectora
En el área de habilidad verbal y comprensión lectora a los estudiantes venezolanos no les va mejor, según datos oficiales. En este caso, el observatorio aplicó la prueba a 362.891 estudiantes de tercer grado, que en su mayoría (84,2 %) demostró estar en el nivel I, otra vez el más bajo.
Resultados similares se obtuvieron con niños de sexto grado. De un total de 387.485 evaluados, 85,4 % se ubicó en el nivel I.
En el caso del área de habilidad verbal y comprensión lectora evaluada por el Secel, del total de jóvenes que realizaron la prueba, 55,04% reprobó mientras que 44,96% logró una nota igual o superior a 10.
En general, los estudiantes venezolanos tienen un promedio 9,11 sobre 20 en este caso.
Seguir una misma línea
La necesidad de unir esfuerzos con el Estado ya había sido mencionada a mediados de 2023 por voceros y representantes del sector educativo venezolano. El 11 de diciembre, Santaella precisó que el Observatorio Nacional por la Calidad Educativa, constituido en 2022, y las pruebas forman parte de un plan que se está realizando con la Unesco.
La ministra apuntó que es fundamental saber “dónde estamos, qué necesitamos para que Venezuela forme parte de los primeros países en nuestro continente para hablar de calidad educativa”, pero no abordó los principales problemas que afectan al sistema, como los salarios paupérrimos de los docentes (de ocho a 25 dólares mensuales) o el déficit de profesores especialistas.
Sin embargo, aseguró que está dispuesta a participar en conjunto con la Ucab para atender la crisis educativa y sus consecuencias.
La Federación Venezolana de Maestros (FVM) ha dejado en claro que la situación no se resolverá sin antes firmar un nuevo contrato colectivo para el sector y garantizar mejores sueldos.
Finalmente, la Ucab estableció las bases para comenzar a atender las deficiencias en las escuelas venezolanas. El 29 de noviembre de 2023, se presentó la Alianza por la Educación en el Paraninfo Luisa Rodríguez de Mendoza de la Universidad Metropolitana (Unimet), que propuso varias estrategias sostenidas en los siguientes pilares: formación y actualización docente, comunicación, escuela digital y formación para el trabajo.
No obstante, para la fecha, hay poca información de cómo y dónde funcionará la alianza, a cuántos beneficiará o si ya ha comenzado a operar en el país.