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Para los caraqueños la cuarentena por la pandemia pareciera que no existiera a pesar que el Gobierno Nacional sigue presentando estadísticas de personas contagiadas y fallecidas por el coronavirus. Esto se pudo concluir en la consulta realizada este lunes 09 de noviembre a habitantes de varias comunidades de Caracas.
Wilmer Benítez, vive en Catia en la parroquia Sucre, señaló que lamentablemente en esta comunidad al igual que en Petare no se han tomado en serio la pandemia, «sólo cuando las autoridades policiales realizan algún patrullaje es, que se ve un poco de orden, creo que el primer mes de la cuarentena se pudo ver un personas con tapabocas, de resto, todo parece normal; porque en Catia viene a comprar mucha gente de otras parroquias para ahorrarse algo de dinero; aquí el caos se ve todos los días y nadie hace nada».
Para María Urdaneta, habitante de la parroquia El Paraíso la cuarentena no ha sido llevada bien por el Gobierno Nacional, hecho que le ha causado mucha confusión e incertidumbre a la ciudadanía, «aquí en El Paraíso veo que sólo se están cuidando las personas mayores, de resto ya todo parece normal, lo único que en la semana radical cierran al mediodía los negocios, pero el flujo de personas en la calle es bastante, tampoco respetan la distancia social».
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«Al llegar diciembre se acaba la pandemia»
Ana María Campos, habitante de la parroquia Caricuao coincide con Wilmer Benítez en que gracias a la poca credibilidad que le tiene la ciudadanía al Gobierno Nacional, el tema de cuido y prevención en la cuarentena no se ha podido llevar cómo debe ser.
«Las comunidades de Caracas están confundidas con el tema de la pandemia porque el Estado no le prestó tampoco una mano amiga, solidaria, a las familias de escasos recursos, la cifra de los fallecidos, el control sanitario, la prevención no se cumplió debido al desorden de las autoridades sanitarias», recalcó Campos a El Pitazo en la Calle.
Campos explicó que en Caricuao, en los 8 meses que va de pandemia, se han reportado por las redes sociales fiestas en las plantas bajas de los edificios, en la calle desde carros con música a todo volumen, «en estos bochinches no se ve ni uno con tapabocas, para esta gente la semana radical y flexible es lo mismo».
Jesús Vásquez habitante de Los Chaguaramos explicó que al llegar diciembre pocos se van a cuidar ya que considera que todos se va a relajar más sumado a la disposición presidencial, » en Catia y en Sabana Grande la gente está comprando sus cosas, se ve el flujo de gente bastante en la mañana, cuando es radical compran en los negocios a puerta cerrada».
Vásquez teme que por el descuido de las personas que no usan bien las mascarillas y no guardan el distanciamiento social aumente más el número de personas contagiadas y fallecidas, «lo grave es que existen y transitan mucha gente en las calles que creen que el virus no existe, que no se cuidan y ponen en riesgos a muchos que sí nos cuidamos».
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«Hay que trabajar»
Jhonny Araque es colector en la parada de buses y camioneta ubicada en Plaza Venezuela considera que la afluencia de usuarios baja sólo en la tarde un poco en la semana radical, » ya no sabemos cuándo es radical o flexible porque la gente tiene que salir a trabajar como yo; tenemos que trabajar porque nadie nos regala la comida ni esos bonos que dan ayuda porque todo está muy caro».
Carlos Guerrero es habitante de la comunidad La Pradera de La Vega, como persona de la tercera edad teme por la salud de su hija que es enfermera, reconoce que si no trabaja no puede alimentar a sus hijos, «yo me cuido uso el tapaboca, pero la verdad es, que ya muchos no están usando ni el tapaboca ni cuidando la distancia, para mí ya se están olvidando de la cuarentena con pandemia y todo, cuando llegué diciembre ni pendiente de esto»
Los consultados explicaron que las diferencias que observan con las semanas flexible y radical son pocas. Destacaron que podrían ser, el cierre de los negocios pero que igual compran a puerta cerrada. Camila Torres, habitante de La Candelaria explicó que no entiende el sentido de esta cuarentena programada por el gobierno, «siempre me causa curiosidad, qué piensa el gobierno cómo se comporta el virus cuando es semana flexible y qué hace cuando es semana radical; creo que la gente que nos gobierna siempre ha estado perdida en materia de prevención sanitaria, de administración de desastre».
