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Guarenas.- A través de un comunicado, la directiva del partido Primero Justicia del municipio Plaza rechazó, este lunes 11 de enero, la propuesta de la jefa del gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Farías, de separar los municipios Chacao, Baruta y El Hatillo del estado Miranda, para incorporarlos a la jurisdicción a su cargo.
El pronunciamiento de la tolda amarilla cuenta con las firmas de Orlando «Pipo» Ceballos, coordinador municipal de Primero Justicia en Guarenas, Gabino Rojas, secretario de organización, Carlos Oropeza, coordinador juvenil, así como los secretarios políticos Teresa Rojas, Juan Quintana, Milagros Terán, Leonardo Oviedo, Carolina Ferrer, entre otros.
«Miranda es una sola y sólo los mirandinos podrán tomar una decisión como esa, mediante un referendo consultivo, como lo establece la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela», se lee en el escrito.
Asimismo, los dirigentes políticos sostienen que la propuesta de Jacqueline Farías significa «un desmembramiento» de la entidad mirandina, la cual está conformada por 21 municipios, agrupados en cinco subregiones.
«Esta pretensión sólo responde a intereses políticos de un régimen al que no le interesa resolver los problemas de agua, gas, electricidad, gasolina, efectivo y demás que tienen los venezolanos. Sólo quieren perpetuarse en el poder y para eso buscan hacer cualquier marramusia para cumplir sus caprichos«, expresa el documento.
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Sucesos de 2017
En el comunicado enviado a medios de comunicación por parte de la directiva de Primero Justicia Guarenas, se recuerda que en 2017, el gobierno de Nicolás Maduro ganó la gobernación de Miranda gracias a la migración de electores, de los centros de votación ubicados en zonas opositoras.
En el caso de Guarenas, el centro electoral San Nicolás de Bari, que está ubicado en la Urbanización Nueva Casarapa es el centro con más electores (12.000) en el municipio y el segundo con más votantes del estado Miranda.
Ese centro fue mudado al Barrio Vista Hermosa, ubicado al extremo sur del municipio a más de siete kilómetros de distancia, en el colegio Zenovia Vergara Chiquito, una escuela estadal denominada de difícil acceso. La migración fue anunciada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) 48 horas antes de las elecciones regionales del 7 de octubre.
Para garantizar el derecho al voto de los electores de este centro, el comando de campaña del candidato opositor (Carlos Ocariz) dispuso de autobuses para trasladar a los electores de Nueva Casarapa.
Sin embargo, durante el trayecto del primer viaje, los autobuses fueron atacados, incluso con disparos por arma de fuego, por parte de civiles armados y colectivos que apoyan a Nicolás Maduro, quienes impidieron que los casarapeños ejercieran su derecho al voto.
