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Puerto Ayacucho.- Debido a las denuncias recibidas de muchos habitantes de los municipios Autana, Atabapo y Alto Orinoco sobre el uso del peso colombiano como principal moneda en lugar del bolívar soberano, el coordinador de la Plataforma Nacional de Conflicto (PNC), José Mejías, aseguró que en el resto de los municipios, en especial los fronterizos, ocurre la misma realidad y que adicionalmente se maneja el real brasileño.
Mejías precisó que como dirigente político ha venido evaluando desde hace un año las quejas que los habitantes de los municipios mencionados hacen en relación con el dinero. Reveló que la moneda nacional desapareció y hoy se hacen las compras y ventas en peso, y señaló además que varios servicios, como el gas doméstico, y beneficios, como los productos del Comité Local de Abastecimiento y Producción (Clap), se pagan con esta moneda impuesta por las mismas autoridades que gobiernan la jurisdicción.
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“Hay personas que han tenido el valor de denunciar estas irregularidades, pero otras están obligadas a callar para que no les quiten la comida del Clap. Es algo notorio que en los municipios todo se está cobrando en moneda extranjera y las mismas autoridades lo están propiciando. En Río Negro y Maroa, que limitan con Brasil, la comida y las medicinas se están comprando con el real brasileño. A pesar de lo difícil, la gente se está adaptando", apuntó.
Asimismo, el también exconcejal de Atures aseveró que en los municipios muy alejados de la capital de la región solo existe la vía fluvial para transportarse, y allí la única forma de pago es la moneda colombiana. “En el interior del estado los indígenas están pasando hambre y a los gobernantes no les importa. Nuestro bolívar ya no vale nada y por eso la gente está emigrando hacia la frontera", afirmó.
Por su parte, Marisol Pérez, procedente de San Carlos, capital de Río Negro, declaró a El Pitazo que en esa localidad el bolívar ya no tiene uso. Esta ciudadana afirmó que los indígenas están abandonando sus casas para irse a Colombia y Brasil para sobrevivir a la crisis que se presenta en la frontera.
“En San Carlos todo se paga en peso o real y es porque estamos en la triple frontera. En la capital de Río Negro reina la desolación, ya nadie quiere vivir allá y las casas se están quedando vacías. Los productos que llegan se venden solo en moneda extranjera y por eso muchos están emigrando a los países cercanos o se vienen a Puerto Ayacucho porque no soportan la situación", dijo la señora Pérez.
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Situación agobiante
La regresiva situación económica en Amazonas ha resultado agobiante hasta para los profesionales de carrera, quienes han buscado otras alternativas para tener una entrada de dinero. Las principales avenidas de Puerto Ayacucho se ven abarrotadas de personas que se han visto obligados a dedicarse a la economía informal y vender productos en peso colombiano.
Crismar Caballero, abogado de 21 años de trayectoria, es una de ellas. Dejó de laborar en la administración pública “por el precario salario que ganaba como profesional del derecho". Destacó que por este motivo decidió emprender un nuevo negocio que no tiene nada que ver con la profesión que estudió durante cinco años. “Es lamentable, pero a todos los que vivimos en frontera nos toca trabajar para cobrar en peso porque el bolívar pasó a la historia", sostuvo.
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