Berlín. El gobierno alemán calificó la renuncia anunciada el domingo 10 de noviembre por el presidente boliviano, Evo Morales, de «importante paso hacia una solución pacífica», necesario para «recuperar la confianza en las instituciones políticas».
«Con su dimisión, el presidente Morales ha despejado el camino hacia unas nuevas elecciones», declaró el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert, quien agregó que el Gobierno alemán celebra este «importante paso hacia una solución pacífica en la que la confianza en las instituciones políticas del país quede restablecida».
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En una rueda de prensa ordinaria, aludió a la declaración de la Unión Europea de 24 de octubre en la que los estados miembros subrayaron su postura de que la convocatoria de nuevas elecciones es «la mejor opción para recuperar la confianza, respetar la voluntad democrática del pueblo y mantener la paz social».
Recordó asimismo que la misión electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) evidenció «graves irregularidades generalizadas» en los comicios presidenciales del 20 de octubre y recomendó repetirlos, lo cual, agregó Seibert al referirse a la renuncia de Morales, confirma «la necesidad de este paso».
«Bolivia está atravesando una grave crisis y naturalmente observamos con preocupación los acontecimientos de las últimas semanas y esta grave crisis se ha generado por las circunstancias en torno a las elecciones presidenciales», agregó.
El portavoz de Exteriores, Christopher Burger, por su parte, subrayó la necesidad de que las instituciones constitucionales, en particular el Parlamento, garanticen que Bolivia pueda contar cuanto antes con un gobierno de transición operativo de cara a la preparación de las nuevas elecciones.
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