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Apure.- Durante un recorrido realizado este martes, 25 de febrero, por el hospital Pablo Acosta Ortiz, de San Fernando de Apure, se pudo evidenciar que en la emergencia de adultos los pacientes solo cuentan con un paral para el suministro de medicamentos vía intravenosa. Igualmente, el personal trabaja a medias porque prácticamente no tienen instrumentos; de hecho, solo pueden contar con un nebulizador para las personas con enfermedades respiratorias.
Debido a la falta de camillas, el personal de salud les aplica inyecciones a los enfermos de pie. El problema continúa, a pesar de que la denuncia fue dada a conocer por El Pitazo el 23 de febrero de este año, concretamente por parte del infociudadano del estado Apure Juan Carlos Salazar (jcs_vzla).
“En el hospital de San Fernando aplican inyecciones intramusculares a pacientes que deben exponer sus partes íntimas en cualquier lugar ante la falta de camillas, mientras el Gobierno regional y municipal celebra Carnavales de paz", publicó Salazar.
Por su parte, María González expresó que los profesionales de la salud del hospital Pablo Acosta Ortiz trabajan con las uñas para atender a los pacientes. Para González, esto es una demostración clara de que el Gobierno es pan y circo, pues, a su juicio, para celebrar Carnaval sí hay recursos económicos.
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Denuncian atención preferencial
Adicionalmente, algunos trabajadores de la sala de Rayos X del centro de salud informaron que a diario este servicio solo realizan 10 radiografías y que los pacientes son atendidos si estos presentan el nuevo formato de ordenes médicas firmadas por el director del hospital.
También hay que destacar que por fallas mecánicas y falta de presupuesto, de los cuatro ascensores del hospital, en la actualidad solo está funcionando uno para el uso de los trabajadores y los pacientes. Además, debido a la crisis económica, el servicio de comedor ofrece todos los días a los pacientes del centro asistencial alimentos inadecuados y de bajo valor nutricional.
El rosario no termina, porque los usuarios del servicio hospitalario denunciaron el deterioro paulatino del techo raso, que con el pasar de los años se ha convertido en un nido de murciélagos.
Las denuncias tampoco pasaron por alto la falta de reactivos, razón por la cual el laboratorio del hospital solo realiza hematologías completas, exámenes de heces, orina y los estudios de sangre indicados para detectar enfermedades de transmisión sexual Vdrl y sida. Mientras, los exámenes químicos, como colesterol y triglicéridos, no están disponibles para los usuarios.
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