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Acarigua.- En las últimas 48 horas, vecinos de los sectores 2 y 3 de la urbanización Durigua, en el este de Acarigua, en Portuguesa, han protestado en cuatro ocasiones, rechazando la serie de apagones que se registran a diario en la comunidad.
En la avenida Circunvalación, desde el domingo 8 de noviembre, los habitantes de esta populosa urbanización han colocado cauchos para obstaculizar el tránsito, y durante las últimas dos noches han quemado los neumáticos y caceroleado por los más de 25 cortes eléctricos que han sufrido desde el fin de semana.
La electricidad les falló el domingo casi a la medianoche y fue restituida en horas de la madrugada de este martes. Durante todo este tiempo los habitantes se vieron imposibilitados de preparar los alimentos, debido a que -ante la fallas en la distribución de gas doméstico que se presenta desde hace cuatro meses-, están obligados a cocinar en hornillas eléctricas.
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Juan Carlos Pérez, habitante del sector, aseveró que los cortes de electricidad han sido continuos. «Durante todo el fin de semana hubo más de 25 apagones, la electricidad duraba 10 o 15 minutos y la volvían a cortar. Ya eso no lo aguantamos, Corpoelec no informa qué es lo que ocurre, si son cortes programados o una falla».
Las variaciones de voltaje han dañado ventiladores, televisores, neveras, refrigeradores y computadores, aparatos que a las familias les cuesta reponer. «Corpoelec no responde por esas pérdidas. Con esta situación que vivimos en el país, nunca más vamos a poder comprar esos equipos que se van dañando", dijo Herminia Ramos, residente de la zona.
Los vecinos aseguraron que en la comunidad habitan adultos mayores y niños que están enfermos y necesitan terapias de oxígeno; en medio de los apagones, estas personas no habían podido recibir el tratamiento.
Sin gas ni agua
El agua también es un servicio que falla en el urbanismo. Desde hace varios días el motor de la bomba que abastece a más de 800 habitantes ha fallado. «Cómo no se van a dar cuenta que estos apagones también nos dejan sin agua. Aquí hay personas adultas que no pueden estar cargando tobos. Este gobierno nos tiene padeciendo, nos tratan como animales», dijo Simón Losada.
