Trabajadores de la Unellez protestaron para recuperar su calidad de vida

Docentes, empleados y obreros sacaron sus pancartas y se apostaron a la entrada de esa casa de estudios superiores de los llanos suroccidentales del país y luego sostuvieron un encuentro informal con el rector a quien le entregaron un pliego contentivo de sus peticiones

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Profesores, empleados y obreros se apostaron en la entrada de la universidad con sus pancartas para exigir mejoras salariales y otras reivindicaciones. Foto: Marieva Fermín

Barinas.- Docentes, empleados administrativos y obreros de la Universidad Experimental de los Llanos Occidentales Ezequiel Zamora (Unellez), protestaron este 23 de octubre, “por la situación difícil por los salarios que devengan en la actualidad y para recuperar la calidad de vida".

Encabezados por el presidente de la Asociación de Profesores de la Unellez (Apunellez), Brunilde Yanez, de la Asociación de Empleados de la Unellez (Aunellez) y otros dirigentes activos y jubilados de esa casa de estudios superiores, unos 40 trabajadores se apostaron con sus pancartas a la entrada de la universidad para reclamar reivindicaciones que les han arrebatado por la imposición de un tabulador salarial que les conculcó los derechos progresivos alcanzados por el sector laboral universitario. 

José Fleitas, Brunilde Yanez y José Ydrogo, como voceros de sus representados, expresaron la necesidad de mejoras salariales y  otros beneficios entre los que citaron el pago de un bono mensual de transporte para todo el personal de la Unellez por un monto de 400.000 bolívares, en el entendido de que todo trabajador venezolano tiene  derecho a un salario suficiente que le permita vivir con dignidad, cubrir para sí y para sus familiares las necesidades básicas materiales, sociales e intelectuales, tal como lo establece la Constitución. que el sueldo que devengan no les c ubre ni siquiera el cinco por ciento de la canasta básica familiar.

En un pliego de peticiones que le entregaron en una improvisada reunión en la sala de espera del del rector, los manifestantes también solicitaron la dotación de materiales, equipos de oficina en el caso  para el personal administrativo y didáctico para los docentes, quienes requieren al menos que les compren borradores y pizarras acrílicas ya la universidad está en deuda con esta dotación desde hace muchos años.

Exigieron que el bono de evaluación de desempeño cancelado hace poco a todos los trabajadores unellistas activos, tenga incidencia salarial en el cálculo de los bonos vacacional y de fin de año y que todas las peticiones sean extensivas al personal jubilado, pensionado y sobreviviente de la universidad.

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Sostuvieron y denunciaron que el tabulador salarial actual inicia con la base de cálculo de un salario mínimo, desmejorando una reivindicación salarial lograda en junio del 2018 en la cual la base de cálculo era de 4.75  sueldo mínimos, evidenciando un desmejoramiento de salario de los trabajadores.

Los dirigentes universitarios denunciaron al Gobierno de violar las convenciones colectivas, de acuerdos federativos y actas de convenio, además, las normas de homologación vigentes establecen que los salarios  del sector universitario deben ser ajustados de acuerdo con el índice de inflación , lo que no ocurre en la actualidad.

Foto: Marieva Fermín

También explicaron que las inter escalas  en el caso del personal administrativo son regresivas, disminuyen los derechos laborales, desmejorando en alto grado los beneficios adquiridos donde  transgreden la carrera académica y administrativa, lo que significa una pérdida de la calidad de vida de los trabajadores universitarios.

Dijeron que las diferencias salariales de acuerdo con la calificación, el desempeño y la experiencia, es lo que define el ascenso de los trabajadores universitarios, implican años de esfuerzo personal, familiar, social e institucional que no pueden ser anulados en conjuros burocráticos, por el contrario, estas deben ser promovidas  en adhesión a sapiencia y la meritocracia.

Los dirigentes gremiales insistieron en que las tablas salariales aprobadas por el Gobierno nacional de manera unilateral, eliminan de un plumazo todo incentivo y motivación para la calificación  del personal docente, administrativo y obreros de las universidades y los distintos sectores laborales dependientes del Estado, estimula la diáspora del país y contraviene toda posibilidad de desarrollo económico y social, así como la calidad de la educación universitaria, la consecución de la idoneidad académica  y la actualización permanente del trabajador universitario, apuntaron en el documentos conjunto que presentaron al rector Alberto Quintero.

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