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San Juan de los Morros.- Transportistas en la capital del estado Guárico aseguran que 120 litros de gasolina son insuficientes para trabajar durante una semana. Esta situación disminuye las ganancias de conductores y colectores, quienes deben ingeniárselas para adquirir los alimentos de primera necesidad.
Hay conductores en San Juan de los Morros, como Rafael Cabrera, que manifiestan sus inconformidades por los retrasos de hasta más de seis horas en las estaciones de servicio y la poca cantidad de gasolina que les suministran a las unidades.
«Uno pierde medio día o un día completo en la cola y trabajamos uno o dos días a la semana. Nos están echando 50 litros, a veces 60 litros», cuestionó Cabrera el lunes 15 de junio en una cola para abastecerse de combustible.
Agregó que las ganancias de una jornada de trabajo no le permiten cubrir las necesidades de su hogar. «Con lo que uno hace en el día se compra una harina Pan o un paquete de arroz, y con eso sobrevivimos hasta que llega la bolsa del Clap», apuntó.
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José Hernández -otro conductor- y Cabrera son transportistas asignados a los autobuses (avances) y ganan, junto a sus colectores, un porcentaje de la ganancia, cuya mayor parte es para los dueños de vehículos. Sin embargo, estos también se ven afectados por las fallas en la distribución del combustible.
«Es pérdida tanto para los que somos avances como para los dueños de los carros. Lo que pasa es que guapeamos porque somos venezolanos y necesitamos trabajar», subrayó Hernández.
José Hernández explicó además que con 60 litros de gasolina no labora una jornada completa: «Yo cubro la ruta Centro-Portal. Lo que nos echan son 60 litros y eso nos alcanza para dos vueltas y medias. Tenemos que esperar hasta tres días para volver a equipar, y así no resulta», indicó.
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Como jefe de familia, Hernández asegura que la conducción de un transporte público es su único sustento y lamenta que hoy no pueda obtener los ingresos mínimos para satisfacer lo requerido en casa: «Lo que nos ganamos hoy da para comprar unas cebollas, y lo que nos ganamos mañana, para comprar unos frijoles, pero eso no alcanza».
150 litros por semana
Algunos transportistas les sugieren a las autoridades un aumento en el suministro de combustible para prestar un mejor servicio y para evitar el temor de quedarse sin el carburante a mitad de camino. «Pedimos que nos echen por lo menos 150 litros de gasolina para trabajar dos días, y si nos dan esa cantidad al menos dos veces por semana, es más rentable para nosotros», sostuvo Hernández.
Distribución de gasolina por grupos
Representantes del transporte público señalaron que existe una organización para que al menos 90 unidades de las rutas urbanas, en el municipio Roscio Nieves, reciban gasolina.
La cantidad total de autobuses están divididos en tres grupos, A-B-C, con 30 unidades por cada uno. De acuerdo con los protocolos de las autoridades, solo atienden un grupo por día y surten un máximo de 60 litros de combustible para cada vehículo.
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