Santa Bárbara de Zulia.- La desolación del sector universitario es cada vez más notoria en la Universidad Nacional Experimental del Sur del Lago (Unesur), al occidente de Venezuela. En la sede principal ubicada en el municipio Colón del estado Zulia, sus aulas lucen con paredes limpias y otras con precaria ventilación.
Allí cada día el número de estudiantes, pero también de docentes es menor, debido a la diáspora que ocasionó la crisis económica y social de Venezuela. “Todos se han ido. Esto está muy duro y los sueldos no alcanzan ni para comer bien. Las aulas de la parte posterior al campus están algunas sin electricidad. Acá se robaron muchos cables. Ni el anfiteatro está operativo, por eso mudaron hasta los actos de grado”, contó un trabajador.
Esta semana, cuando el personal de Unesur registra inscripciones para nuevos ingresos, el proceso se llevó a cabo sin contratiempo porque no había muchos aspirantes. En la sede universitaria estudiantes cuentan que el abandono del módulo posterior, la falta de unidades de transporte y el precario servicio alimentario del comedor, evidencian una desmejoría de los servicios.
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“Esta situación ha hecho que muchos deserten y no sólo son estudiantes, de aquí se han ido muchos profesores”, dijo Gabriela Troconis, quien retiró sus papeles porque piensa cursar estudios en otro estado del país.
Las autoridades no han querido revelar cifras de deserción, aunque un paseo por los pasillos del campus universitario deja en evidencia la baja en la matrícula en la universidad pública zuliana. Se espera el inicio de clases para las próximas semanas. En la Unesur ya no se dan semestres sino trimestres y la comunidad unesurista siente la institución permanece en decadencia.
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