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En el municipio Mara del estado Zulia se mantiene la vigilancia epidemiológica ante los casos sospechosos de COVID-19 reportados en la entidad. El domingo 9 de agosto el equipo médico de la región visitó casa por casa a los habitantes del casco central de El Moján para realizar las pruebas rápidas con la finalidad de prevenir focos de contagios. Este mismo equipo se despliega en las diferentes comunidades de las siete parroquias que conforman el territorio marense.
Sara Gutiérrez, habitante del municipio, aseguró que la aplicación de las pruebas rápidas alivia un poco a las familias que están en zozobra debido al aumento de casos en Venezuela.
“Estamos agradecidos con el equipo de salud que nos visitó para realizar esta prueba, porque hay muchas familias que están preocupadas por las cifras de casos deCOVID-19 que vemos a diario», afirmó Gutiérrez.
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El alcalde de la localidad, Luis Caldera, manifestó a través de sus redes sociales que están vigentes las medidas de bioseguridad e hizo el llamado a la reflexión. Caldera indicó que de no haber parado el transporte público en el municipio, las cifras de casos de COVID-19 pasarían de los 1.000 casos. “Según las estadísticas del día de hoy en Mara -afirmó- existiría un total de 1.300 casos e iría en ascenso. Sabemos que el pueblo necesita trasladarse, pero primero está la salud".
El alcalde se refirió al personal médico que está batallando en medio de la pandemia que ha afectado a cientos de familias venezolanas. “Ustedes son los apóstoles de la salud en nuestro pueblo", destacó.
Como parte de las medidas se instaló un cordón de seguridad peatonal en el casco central y en la zona comercial de San Rafael de El Moján para garantizar el cumplimiento de las normas sanitarias. Es obligatorio para el ejercicio de la actividad comercial establecer puntos de desinfección en cada local.
