Barcelona.- Siete detonaciones escucharon los clientes que se encontraban, la tarde del 1 de septiembre, en la cadena Farmatodo ubicada en el sector Venecia del municipio Urbaneja, zona norte de Anzoátegui, antes de observar que un hombre yacía en el interior de una camioneta Toyota Fortuner blindada de color beige.
Muchas fueron las personas que salieron a socorrer al desconocido, pero sólo dos se atrevieron a montarse en el vehículo para trasladarlo hasta el centro asistencial más cercano, donde los galenos observaron que carecía de signos vitales.
Minutos más tarde se conoció que el infortunado era Leonardo Santilli, un reconocido empresario zuliano y contratista de PDVSA que fue acusado de lavado de dinero por el gobierno de EE.UU el 20 de abril, fecha en la que según la periodista Maibort Petit, informó que había sido señalado por conspiración para cometer delitos de lavado de dinero, instrumentos para lavado de dinero y transacciones monetarias ilegales cometidas entre los años 2014 y 2017.
Petit reveló en la investigación realizada que Santilli era dueño de la empresa venezolana Constructora Casaco Co y PLD Inversiones C.A, además de las firmas estadounidenses SGP Group Corp registrada al sur de Miami y A&M Support Inc registrada en Weston, Florida.
El gobierno de EE.UU logró intervenir 17 cuentas bancarias a Santilli y congeló $ 44.7 millones que tenía en cuentas bancarias el investigado, producto de hechos de corrupción cometidos en la Faja Petrolífera del Orinoco en Venezuela.
Hasta ahora las autoridades del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) del estado Anzoátegui, no han ofrecido detalles sobre el hecho, pero un fuente extraoficial reveló al equipo de El Pitazo que todo apunta a un sicariato y que se encuentran en revisión de las imágenes capturadas por las cámaras de seguridad que están en el estacionamiento de la cadena de farmacias.