Conductores de Margarita se quejan del plan de distribución de gasolina

Desde el pasado lunes, 30 de marzo, las autoridades gubernamentales del estado Nueva Esparta implementaron el plan pico y placa para surtir de gasolina a los conductores que tienen salvoconducto. Sin embargo, los conductores manifestaron no tener información precisa sobre los días de abastecimiento y sobre las estaciones de servicio autorizadas para cada sector.

Ese día, los conductores se quejaron de las distancias de las bombas de gasolina que venían funcionando desde que el gobierno regional cerró el pasado 20 de marzo las gasolineras y dejó dos operativas para atender al personal autorizado, entre ellos el sector salud, que alegó que trabajar en municipios lejanos les dificulta llegar hasta las estaciones de servicio donde se les atiende.

Simón Díaz es médico cirujano, madrugó el lunes, 30 de marzo, para llenar el tanque de su vehículo y cuando tenía tres horas en la cola un guardia les dijo que aunque tenían preferencia, debían esperar. «Trabajamos en la Península de Macanao y nos están mandando a surtir de gasolina en Los Robles, municipio Maneiro, y esa (estación de servicio) está en el otro extremo de la isla. Vemos esto de manera muy injusta, que tomen esas acciones con el sector salud cuando somos un equipo necesario durante esta pandemia», expresó.

Por su parte, Manuel Martínez, conductor, se quejó de la falta de combustible en la isla. Aseveró que utiliza su vehículo para trasladar de manera gratuita a médicos y enfermeras desde su comunidad, ubicada en San Antonio, municipio García, hacia La Asunción, en Arismendi, ya que no todo el personal de salud cuenta con vehículos.

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«Por mi casa viven unos doctores y enfermeras y me ha tocado llevarlos a trabajar a La Asunción y regresé a la casa ya echándole aire al carro porque ya no tenía gasolina, tuve que pedirle a otro vecino diez litros para poder venir hasta la bomba, donde tengo horas en la cola para surtir de gasolina. Trancarle la gasolina al pueblo es atarlo más de manos y ahora es peor con eso que dicen que es por número de placa, con salvoconducto y en estaciones de servicio específicas», manifestó.

Martínez considera que las autoridades deben ser flexibles con aquellas que personas que colaboran con el traslado de otros hasta sus trabajos o a comprar comida, pues el transporte público tampoco funciona. «Los que tenemos carros estamos moviendo a nuestros vecinos, pues no hay transporte ni para ir a comprar comida y acá en Margarita todo queda lejos, el gobierno tampoco hace nada para traernos comida a la casa», afirmó.

Quienes hacen cola para cargar el tanque de su vehículo se llevan hasta la comida, porque saben que la espera es larga. «Aquí pasamos horas, nos tenemos que traer hasta la comida porque a veces salimos de la cola como a las cinco de la tarde», dijo Manuel Machacuto, distribuidor de plátanos.