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Cumaná.-El personal que trabaja en el hospital Virgen del Valle, de Araya, denunció intimidaciones y acoso laboral de funcionarios de la Fundación Regional para la Salud (Fundasalud-Sucre), ente adscrito a la Gobernación de Sucre. Debido a esta situación, en los últimos días abandonaron sus cargos los médicos que prestaban sus servicios en el área de traumatología y ginecología.
Enfermeras y médicos están cansados de ser humillados por quienes dirigen la salud en el estado Sucre. “La segunda semana de febrero renunció el doctor Silvano Colon, quien se desempeñaba como traumatólogo desde el 2018 en este hospital", aseguró Carlos Fuentes, quien labora en este centro de salud.
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El trabajador explicó que las renuncias de los especialistas se deben a la persecución política que mantienen varios funcionarios desde Fundasalud contra el personal que labora en el principal hospital de la península de Araya. “Quienes pensamos diferente y no somos afectos al gobierno de Nicolás Maduro, somos llamados adecos, copeyanos y escuálidos", indicó.
Esta información fue corroborada por unos de los especialistas del hospital de Araya, quien aseguró a El Pitazo que sus colegas están renunciando debido a las malas políticas implementadas por quienes dirigen la salud en la entidad. «Cuando se lograba planificar las intervenciones quirúrgicas a los pacientes, eran suspendidas por órdenes de terceros. Los médicos se cansaron de tantas carencias y limitaciones para prestar sus servicios al pueblo", denunció.
El profesional de la medicina, quien solicitó no divulgar su nombre para evitar represalias, aseguró que debido a la falta de médicos especialistas en este centro de salud, el hospital fue catalogado tipo 1 en el año 2000. Por tal razón ahora funcionará como ambulatorio para remitir a los enfermos al Hospital Universitario Antonio Patricio de Alcalá (Huapa), en Cumaná.
El mismo médico informó que el pasado lunes 2 de marzo, las 25 mujeres que asistieron a su consulta en el área de ginecología se encontraron con la noticia de que no iban a ser atendidas porque la doctora con la cual se consultaban había presentado su renuncia ante las oficinas de Fundasalud.
“La idea es solucionarle los problemas de salud a la gente sin salir de Araya. Esta situación se deriva de que hay personas que no están capacitadas para estar en los cargos de gerencia. Este desastre que vivimos los enfermeros y médicos afecta directamente a los pacientes", denunció el especialista.
Sin ambulancia marítima
Carmen Mago, residente de Araya, explicó que los pacientes más perjudicados con la renuncia de la ginecóloga son las mujeres que desde el inicio de su gestación se encontraban en control con la citada médica. Ahora las 40 cesáreas y 800 mujeres que eran atendidas mensualmente en la zona tendrán que ir a buscar una cita para el hospital de Cumaná.
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“Este traslado generará una serie de gastos a las personas, que no solo tendrán que pagar el transporte marítimo, sino también cancelar alimentación. Asimismo, sus acompañantes tendrán que dormir en los pasillos del Huapa", expresó Mago.
Recalcó la ciudadana que ante la falta de una ambulancia marítima, la vida de las mujeres embarazadas y sus bebés por nacer corren peligro, porque si los dolores del parto se presentan en la noche no podrán trasladarse de inmediato debido a que la Alcaldía de Araya, para variar, no cuenta con una embarcación adecuada para trasladar a los pacientes a la capital sucrense.
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