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Habitantes de varios sectores de la parroquia Caricuao hacen un llamado urgente a las autoridades sanitarias para que adelanten la dotación de medicinas para la tensión en la Farmacia Patria ubicada en el dispensario Pedro Iturbe de la UD2, así como en el Servicio de elaboraciones farmacéuticas (Sefar) en Las Adjuntas de Macarao.
Ana María Jiménez es docente jubilada, vive en la UD2 de Caricuao, denunció a El Pitazo en la Calle que ya tiene más de cuatro meses sin tomar las pastillas para su tensión y no cuenta con dinero para comprarlas, espera por las que le dispensan en la Farmacia Patria ubicada en el dispensario Pedro Iturbe.
«Con mi pensión no me alcanza para comprar las medicinas, fui al Sefar de Las Adjuntas y tampoco tiene medicinas para la tensión, es necesario que las autoridades doten a los centros médicos públicos de la parroquia porque en verdad, necesitamos cumplir con el tratamiento para no decaer más«, expresó la habitante de la UD2.
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Elodia Ramírez habita en la UD7 de la parroquia Caricuao señaló que lleva varios meses mandando a su nieto de 20 años al Sefar de Las Adjuntas y siempre le dicen que no tienen pastillas para la tensión. «Me hacen falta estas pastillas, todo el dinero lo estamos usando para la comida, esperamos que de verdad cumplan y doten el Sefar porque en la parroquia hay muchas personas de la tercera edad enfermas y sin plata».
Carmen Navarro vive en la comunidad Puerta Verde de la parroquia Macarao y señaló que hace más de tres meses no ha podido obtener las pastillas de la tensión para su madre debido a que en El Sefar no tienen. Hace un llamado al Gobierno Nacional para que ayude a la población necesitada de medicinas.
