Caracas.- Preocupado porque no podrá estar en el próximo inicio de clases en este año, cuando debe entregar su tesis para graduarse de bachiller, así se muestra un adolescente de 16 años, que permanece detenido desde el 31 de julio al ser acusado de participar en las protestas postelectorales.
El joven estudiante de sexto año de Contabilidad en la Escuela Técnica Robinsoniana Juan España, de El Valle, es uno de los ocho adolescentes que se encuentran recluidos en la Casa de Justicia 431, en El Cementerio. Su madre, Nérida Ruiz, junto a las demás representantes, se mantienen luchando para exigir la libertad de sus hijos.
3 días después de la manifestación, el joven se encontraba a cargo de su hermano, de apenas 1 año y 10 meses, en su vivienda en el barrio El Tamarindo, en El Valle. Horas antes, su madre respaldó una denuncia hecha por el consejo comunal sobre la permanencia en la zona de varias motocicletas que fueron hurtadas en un concesionario de motos Bera durante las protestas.
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La policía llegó al barrio, pero ella aún no estaba en la casa. El joven se asomó, como otros vecinos, para ser testigos del operativo. Frente a su residencia se encontraba una de las motos y cuando la inspeccionaban, otros policías sorprendieron al adolescente en la puerta de su casa mientras enviaba un mensaje contando a varios compañeros lo que estaba sucediendo.
Según detalló a El Pitazo, la madre del joven, Nérida Ruiz, este fue el argumento para llevárselo preso. Los funcionarios aseguraron que había manifestado y participado en el saqueo porque contaba a otros dos jóvenes, que también capturaron, sobre la actuación de los uniformados.
Al adolescente lo pasearon por los centros de detención Coche y Zona 7, donde estuvo recluido con presos comunes. Según su madre, fue uno de los pocos que no recibió torturas, a diferencia de los otros adolescentes detenidos, a quienes les aplicaron descargas eléctricas, los golpearon y asfixiaron para obligarlos a grabar un video en el que aseguraran que líderes opositores les pagaron 50 dólares para que salieran a manifestar y generaran el caos en las calles.