ANÁLISIS DEL CORONAVIRUS EN VENEZUELA (DEL 22 AL 27 DE MARZO)

Las últimas cifras presentadas por el Ejecutivo son inconsistentes. La data del Distrito Capital, que contabilizaba 21 contagios hasta el 23 de marzo, fue cambiada y al día siguiente, en un nuevo balance, registró 7 menos. Los estados Táchira y Portuguesa, que tenían un caso cada uno, fueron sacados de la lista de entidades con pacientes con COVID-19, luego de que sus gobernadores desmintieran la información dada por Nicolás Maduro. El Pitazo analiza la segunda semana de anuncios oficiales sobre el COVID-19 en el país

En los últimos cinco días hubo cambios en la narrativa del Gobierno respecto a la información de nuevos casos de COVID-19 en Venezuela que revelaron más dudas e inconsistencias acerca de la data epidemiológica que recae sobre la Comisión Presidencial para la prevención y el control de la enfermedad, declarada pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y no en el Ministerio de Salud.

El traspiés comenzó con los datos relacionados con casos importados. Nicolás Maduro, quien ocupa la presidencia con el peso del desconocimiento de 61 naciones del mundo, dijo el 22 de marzo, en un contacto televisivo en el canal Venezolana de Televisión (VTV), que el país registraba 77 contagios confirmados con el virus y sostuvo que todos eran importados; es decir, que contrajeron la infección en el exterior. Sin embargo, la lámina que mostró en pantalla, que detallaba los casos distribuidos por país de origen, solo contabilizaba 43.

La presentación mostrada indicaba que 21 se contagiaron en España, 10 en Colombia, 3 en Estados Unidos, 3 en República Dominicana, 3 en Italia, 2 en Brasil y 1 en Perú. Sobre el resto de los casos (34), Maduro no aclaró si eran importados o autóctonos, es decir, personas que se infectaron dentro del país sin viajar al exterior.

Mantener la tesis de que todos los casos son importados tiene una razón para Maduro, a juicio de exministro de Salud, José Félix Oletta, quien asegura que el Gobierno pretende dar la imagen de que contuvo a tiempo la epidemia con la detección de casos importados y evitó la propagación del virus dentro del territorio. “Buscan argumentar que todo les está saliendo bien, que aplican un modelo adecuado y que actuaron a tiempo", señala.

El epidemiólogo Andrés Barreto se ampara en esta tesis: “El Gobierno necesita enviar el mensaje de que tiene todo bajo control con esta epidemia. Si aceptan la transmisión local tendrían que decir que hay más casos en el país –un enfermo puede infectar hasta 3 personas– y anunciar que están en la fase dos de la epidemia y que la cuarentena no dio resultados", dice Barreto.


MANTENER LA TESIS DE QUE TODOS LOS CASOS ASEGURA QUE EL GOBIERNO PRETENDE DAR LA IMAGEN DE QUE CONTUVO A TIEMPO LA EPIDEMIA


Los parámetros de la OMS para la enfermedad de COVID-19 indican que los países al reconocer contagios locales, pasaría a la fase 2 de las etapas de importación del virus, que se denomina “dispersión comunitaria" y ocurre cuando casos se contabilizan en centenas y las personas se contagian unas a otras independientemente de que el caso sea importado o autóctono. A esta situación se llega entre 40 y 50 días desde la notificación de primer caso confirmado.

Pero desde el 14 de marzo, el Gobierno reconoció contagios dentro del país. El ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, señaló que de los 8 casos confirmados ese día, dos habían adquirido el virus dentro del país: 1 en Cojedes y 1 en Apure.

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A pesar de confirmar los dos primeros casos transmisión local, Rodríguez no habló más sobre estas personas en las siguientes alocuciones y, al igual que Maduro, dijo que todos los pacientes notificados los días siguientes se infectaron fuera de Venezuela, como ocurrió en la alocución del 21 de marzo cuando dijo que los 70 casos confirmados ese día con coronavirus todos eran 100% importados.

Pese a mostrar una lámina en cámara, Maduro aún informaba el 23 de marzo, cuando la cifra de incidencia por COVID-19 en el país subió a 84 contagios, que todos los pacientes eran procedentes de Europa y Colombia, incluso detalló que de las 3 personas con coronavirus detectadas ese día en Barinas, 2 prevenían de Cúcuta. Con este nuevo dato, el número de casos importados de Colombia subió a 12, según el registro oficial.

Fue en la alocución del 24 de marzo, con 91 infectados acumulados, cuando Maduro admitió “casos comunitarios" (transmisión local) en el país sin ofrecer un número.

La noche del 25 de marzo, la vicepresidente Delcy Rodríguez comunicó que el país alcanzó a 106 casos de coronavirus al confirmarse 15 nuevos contagios; pero, horas más tarde, en un contacto telefónico durante la transmisión de programa Con el mazo dando de VTV, Maduro asomó que de estos 15 pacientes, 10 eran importados y 5 “comunitarios" pero sin desglosar la ubicación de los contagios.

Maduro tampoco reparó en detallar la distribución de los casos importados, pero sí mencionó los países de procedencia: Panamá, Reino Unido, España y Colombia. Agregó que, en general, habían recibido personas contagiadas de Estados Unidos, Italia, Perú, Chile y Suiza, última nación de donde llegó 1 caso, enfatizó Maduro.

En síntesis, en los balances ofrecidos por la Comisión presidencial para la prevención y control del COVID-19, se desprende que del total de 107 casos acumulados hasta el 26 de marzo, solo 55 se registran como provenientes del extranjero (51%). De la cifra de 55, 46 se les conoce el país de procedencia.

Más allá de Europa y Colombia

El Gobierno, desde que confirmó la epidemia, se centró en decir que todos los casos de COVID-19 provenían de Europa y Colombia. Pero la información plasmada en la lámina que Maduro mostró en cámara el 22 de marzo jugó en su contra. Esos datos reflejaban que no todos los casos provenían de Europa y Colombia.

Hay más: Jorge Rodríguez, el 21 de marzo, dijo: “Todos los casos que presenta Venezuela (…) son importados de Europa y de Colombia. No hay ningún caso que sea autóctono, que sea de territorio venezolano", dijo.

Pero luego se contradijo al decir que, además de España, Italia y Colombia, habían casos de Estados Unidos, como ya incluso lo había asomado el 14 de marzo, y de Panamá.


El Gobierno necesita enviar el mensaje de que tiene todo bajo control con esta epidemia. Sí aceptan la transmisión local tendrían que decir que hay más casos en el país

Andrés Barreto, epidemiológo

En la lámina que Maduro presentó al día siguiente sobre los casos importados no aparecía el número de casos de Panamá. El 25 de marzo, en el programa Con el mazo dando de VTV, Maduro volvió a decir que llegaron casos de este país y otras naciones.

Luego, el 26 de marzo, informó sobre el primer fallecido por COVID-19 en el país, un hombre de 47 años del estado Aragua, había sido infectado por una persona cercana a él que había llegado de Panamá con el virus.

Epidemia diseminada

El discurso del Gobierno es inconsistente sobre el número de casos acumulados. La última cifra oficial es de 107 enfermos confirmados en todo el país hasta el 26 de marzo. Ahora, en los discursos anteriores, el Gobierno cambió la cantidad de casos de Caracas y sacó de la lista de estados a Táchira y Portuguesa que tenían un enfermo cada una, luego de que sus respectivos gobernadores desmintieran la información ofrecida por Maduro.


EL GOBIERNO CAMBIÓ LA CIFRA DE CASOS DE CARACAS Y SACÓ DE LA LISTA DE ESTADOS A TÁCHIRA Y PORTUGUESA


El caso más elocuente es el de Distrito Capital, una de las entidades con más contagios, que hasta el 23 de marzo acumulaba 21 confirmados, según el conteo oficial. Sin embargo, el número bajó a 14 en el balance ofrecido al día siguiente. Actualmente, tiene 17 con el nuevo caso reportado este 26 de marzo. El Gobierno no justificó el cambio en el número de contagios en Caracas.

En el Táchira, la gobernadora Laidy Gómez aseguró el 22 de marzo que no tenía conocimiento del primer enfermo de COVID-19 en esa entidad. También en esa línea se pronunció el gobernador de Portuguesa, Rafael Calles, quien desmintió la existencia de un caso de coronavirus en ese estado y dijo, en cambio, que el paciente se encontraba en La Guaira (antiguo estado Vargas) que actualmente acumula 9 contagios.

Desde el 22 de marzo, tres estados reportaron nuevos casos: Barinas (3), Guárico (1) y Bolívar (1). De igual forma, Maduro reconoció 4 casos confirmados que se notificaron en el archipiélago de Los Roques. En síntesis, la epidemia está activa en 17 estados del país, y es Miranda la entidad con más incidencia al contabilizar 44 casos notificados hasta el 25 de marzo.

De los 107 pacientes se han recuperado 31; 3 presentaron complicaciones graves y hay un fallecido de 47 años. La data oficial da cuenta que a 91 se les conoce el sexo (53 masculinos y 54 femenino) y a 27 pacientes se les desconoce aún la edad. El grupo etario más afectado es el comprendido entre 30 y 39 años (27 casos).

Para la detección de casos, el Gobierno creó una encuesta que los venezolanos deben responder a través del Sistema Patria, por el cual las autoridades obtienen datos de personas que manifiesten síntomas relacionados con la enfermedad y con el que ejecutan “despistajes personalizados". Según lo reportado el 26 de marzo por la vicepresidenta Delcy Rodríguez, un total de 14.779.644 respondieron el test y se notificaron 42.643 casos sospechosos o “potenciales a atender", de los cuales 32.653 fueron atendidas y se identificaron 2.125 con síntomas probables.

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