Santa Bárbara de Zulia.– Edgar Alberto Velásquez Peralta, de 56 años, recibió tres impactos de bala cuando intentaba atracar a un comerciante en Santa Bárbara de Zulia, en el municipio Colón este jueves 19 de noviembre.
El hombre, que veía las calles desoladas, llegó en horas del mediodía al taller de relojería El Guajiro y allí encañonó con un arma corta, marca Beretta, calibre 380 milímetros, a Giovanny José Finol, dueño de la joyería, y a dos damas que eran atendidas en el local 1-52 ubicado, en la calle antes Federación de Santa Bárbara, detrás del banco Mercantil.
El asaltante, bajo amenazas de muerte, le gritaba al relojero que le diera las prendas de mayor valor y el dinero en efectivo, sin embargo Finol mostró su negativa y también sacó a relucir su arma de fuego, contó la policía.
En un instante tanto el atracador como la víctima se apuntaron entre sí en una discusión que giraba entorno al preciado botín que Velásquez quería llevarse consigo, pero la disputa acabó cuando un Finol cada vez más acorralado no tuvo otra opción que, en defensa propia, halar del gatillo.
Tres balas impactaron en el pecho de Edgar, quien quedó tendido en el establecimiento sin signos vitales y bajo su cuerpo se deslizó un charco sangriento.
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Los vecinos, que escucharon las detonaciones, en lugar de resguardarse se asomaron a los frentes de sus viviendas para saber de dónde provenía ese ruido.
Al sitio llegaron diversas comisiones policiales, entre ellas del Sistema de Investigación Penal del Estado Zulia (Sipez), así como del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia (Cpbez) y de la policía municipal (Policolón), organismos que corroboraron los hechos y los precisaron en sus reportes de novedades.
El cuerpo de Velásquez fue llevado hasta la morgue del hospital de Santa Bárbara por funcionarios adscritos al eje de investigación de homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), base San Carlos, mientras que el caso está en manos de la Fiscalía décimosexta del Ministerio Público a cargo del jurista Jhon Urdaneta.
El presunto antisocial residía en el sector Monte Claro, parroquia Santa Bárbara, cerca de la única terminal terrestre de pasajeros de la población del Sur del Lago. Familiares reconocieron al infortunado en la morgue hospitalaria. Lamentaron la pérdida de su ser querido y desconocían que estaba en esas andanzas.