El gobernante Nicolás Maduro anunció que firmó una orden para sacar “de circulación” de Venezuela la red social X (antes Twitter) durante 10 días, de acuerdo, según dijo, con una propuesta que le hizo Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel).
“He autorizado que Conatel saque la red social X (Twitter), durante 10 días de Venezuela, para que presente sus recaudos ante esta instancia. En Venezuela hay ley, hay Constitución, hay instituciones, hay Estado, hay un pueblo al cual hay que respetar”, dijo Maduro durante una alocución desde el palacio de Miraflores en Caracas este jueves 8 de agosto.
Te puede interesar: Más de 70 países han bloqueado o restringido el acceso a redes sociales, ¿se sumará Venezuela?
Antes del anuncio, Maduro atacó a Elon Musk y dijo que el dueño de la plataforma ha violado todas las leyes de Venezuela y de la propia plataforma al emitir mensajes contra Venezuela.
“Fuera X por 10 días de Venezuela”, añadió.
Esta es la segunda arremetida contra una aplicación que inició el gobierno de Maduro durante este jueves, cuando limitó los servicios de funcionamiento de la red de mensajería instantánea Signal.
“La página web de signal⸱org se encuentra 🛑bloqueada en la mayoría de los proveedores de internet. Comenzó hoy #8Ago a las 3:00 PM hora de Venezuela. En múltiples ISP, el uso de Signal también está siendo afectado por el bloqueo”, reportó la organización sin fines de lucro VE Sin Filtro a través de su cuenta en X.
Insiste en que deja los resultados en manos del TSJ
El mandatario nuevamente atacó a Edmundo González Urrutia, candidato de la Plataforma Unitaria Democrática a la presidencia, y lo señaló porque no se presentó ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). También afirmó que fue el diplomático de carrera quien organizó los «comanditos» que insistió en tildar de violentos.
«En los ataques de las bandas criminales de nueva generación, hay más de 2.400 detenidos, el 80% no votó. Estaban preparados para asaltar la paz. Pero no lo lograron», afirmó Maduro.
El gobernante también añadió que deja en manos del TSJ la decisión sobre la validez de las elecciones presidenciales, que son cuestionadas por una veintena de países y que han desatado una ola de protestas y represión en el país.