¿Maduro es una máquina de destrucción de votos? Lo que opina el chavismo disidente

Pese a los bajos índices de popularidad, la candidatura a la reelección de Nicolás Maduro para 2024 no parece estar en discusión dentro del Psuv, al menos públicamente.

Hasta principios de noviembre, la encuestadora Delphos le otorgaba al gobernante en ejercicio alrededor de 18% de aprobación frente a la ganadora de las primarias María Corina Machado que posee entre 40% y 45% del apoyo del electorado venezolano.

Otra encuestadora, Meganálisis reveló que 81,9% de los venezolanos no votarían por Maduro en unas presidenciales y que más de 70% lo haría por Machado.

Los sondeos de opinión también advierten que las preferencias por la exdiputada nacional y el descontento hacia el gobierno dominan todos los estratos socioeconómicos de la población.

Ante este escenario, aparentemente catastrófico para el poder político en Miraflores, voces del chavismo disidente consultadas por Efecto Cocuyo, como la del exministro de Comunicación e Información, Andrés Izarra, advierten que el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) cometerá «suicidio político» si se insiste en que Maduro, a quien tildan de «máquina de destruir votos», repita en la presidencia.

¿Qué pasa en la base?

La dirigencia de base tampoco ve con malos ojos una candidatura distinta a la del gobernante y hasta la considera necesaria, se siguen manejando nombres como el de Delcy Rodríguez, como alternativa, pero se reconoce que si es la línea desde la dirección del Psuv que Maduro repita hay que acatarla, con todo y consecuencias.

«De la estructura parroquial para arriba, municipal, estadal, el trabajo se hace pero en las estructuras de base (jefes de calle, comunidad, Ubch, Consejos Comunales, entre otras) la gente está dispersa. Hay inconformidad, uno los llama y no contestan, no van a las reuniones, no se comprometen, no hacen lo que se les pide. Yo no vería mal que el candidato sea otro a ver si la gente se anima», señaló a Efecto Cocuyo un dirigente parroquial del Psuv en Caracas que prefirió omitir su nombre.

Al respecto, el excoordinador nacional de Clase Media Socialista, Carlos Hurtado, sostuvo que el «adoctrinamiento» de una parte del pueblo venezolano durante décadas ha rendido sus frutos, por lo que no hay una fuerza de base que se levante contra la actual élite política y reclame un cambio urgente.

Advirtió que el gobierno lo sabe y saca provecho de ello, por lo que los bajas cifras de apoyo, afirma, no serán impedimento para buscar —por todos los medios— mantenerse en el poder.

Lo que no se permitirá, por los bajos números, recalca, es que Machado pueda ser candidata en las presidenciales para que no «arrase» con Maduro.

«La baja popularidad no será un impedimento para que Nicolás Maduro sea el candidato del sector oficialista. No creo que esté planteada otra opción, pero en el escenario que le den entrada a María Corina Machado como candidata, la situación se le pondrá muy cuesta arriba al gobierno y ahí , solo ahí, tendrían que sacar a otro u otra candidata que podría ser Delcy Rodríguez. Pero es muy difícil ese escenario sobre todo por el lado del radicalismo oficialista», dijo.

Delcy Rodríguez hace campaña por referendo sobre el Esequibo en parroquia El Valle
Delcy Rodríguez es mencionada entre las opciones electorales del Psuv

«No está 100% decidido»

Para Izarra, son precisamente los bajos números y el impulso que tiene la oposición a partir de las primarias lo que le hacen considerar que «la opción de Maduro» no está «100%» decidida.

«El referendo por el Esequibo ofrecerá data para terminar de tomar esa decisión. Sería un suicidio para el partido. La gente no se quiere suicidar, obviamente», sostuvo.

Izarra tiene rato señalando que para el chavismo, Maduro es un «ancla al cuello», por lo que insta a las bases preocupadas por el futuro del movimiento a presionar a la «cúpula» para que se hagan primarias y se permita a las bases escoger al candidato de la revolución.

«Maduro es quien menos garantiza un futuro para el chavismo. Quien logre desplazarlo, contará con apoyos significativos, tanto internos como externos. La pregunta es: ¿Cuánto más está dispuesto a sacrificar el madurismo y cuánto más soportará Venezuela antes de llegar a un punto de inflexión?», pregunta Izarra en su blog Notas desde Lejos el pasado 3 de noviembre.

El director de Delphos, Félix Seijas, también coincide en que dentro del chavismo las aguas «no están calmadas», sobre todo por el deterioro de las condiciones de vida de buena parte de la población, que los incluye. A partir de un estudio reciente afirmó que dentro del chavismo crítico no se está de acuerdo con la inhabilitación de Machado.

¿Maduro puede recuperar popularidad?

Consciente de los bajos números, en el canal del Estado se replica una y otra vez una encuesta de Hinterlaces, firma ligada al chavismo, en la que se asegura que de ser el «próximo domingo» las elecciones presidenciales, 63% votaría por el candidato del Psuv y 18% por el candidato de la opositora Plataforma Unitaria.

Se esperaría que ante un mayor relajamiento de sanciones internacionales, producto de la negociación con Estados Unidos, a cambio de garantías democráticas para las presidenciales, Miraflores usara los recursos para mejorar los sueldos y salarios de los trabajadores del sector público, como una de sus cartas para revertir el bajo apoyo popular. Otros temas que serían usados son, por ejemplo, la disputa con Guyana por el Esequibo.

Para Hurtado, antiguo aliado del chavismo en el Gran Polo Patriótico, el referendo sobre el Esequibo marca el arranque de la campaña electoral por la reelección de Maduro.

De allí que subrayó, en lugar de estar preocupado por los bajos números, el gobierno se concentra en «administrar desde ya los votos que obtendrán del referendo» para usar ese apoyo de cara a las presidenciales.

«Ya lo estamos viendo, el tema del Esequibo es un excelente plan electoral y el gobierno sabe sacarle muy buen provecho a esos temas. Nunca les importó el Esequibo y es en este momento que lo usan para poner activos a tirios y troyanos. El tema del Esequibo obliga a todos los sectores a movilizarse, el referendo es el factor caza votos para el oficialismo», afirmó.

Para Izarra, en cambio, no hay nada que Maduro pudiera hacer para recuperar popularidad y que en unas elecciones con garantías, ni siquiera un candidato sustituto lograría derrotar a un abanderado opositor unitario, sobre todo si se habilita a María Corina Machado.

Pese a ello, indicó, figuras como el gobernador de Carabobo, Rafael Lacava, y Delcy Rodríguez «tendrían más chance de dar la pelea» en los comicios de 2024.

«La inconformidad del chavismo débil hacia el Gobierno está empeorando. La única forma de revertir o atacar eso es con el clientelismo (…) Por eso es que Maduro está buscando dinero, para que puedan volver las cajas CLAP con mejoras, entre otros incentivos sociales. Mientras este impulso no llegue seguirá perdiendo capacidad de maniobra en sus bases; y no es tan sencillo revertirlo», advirtió Seijas en entrevista con La Gran Aldea, el pasado 14 de noviembre.

El analista indica que está por verse cuánto está dispuesto a ceder Maduro con las garantías electorales a cambio del levantamiento de sanciones.

En el caso de que Miraflores siga adelante con unas elecciones que no serán reconocidas a lo interno ni por la comunidad internacional, también se pregunta hasta dónde lo acompañaría su estructura en ese camino, de allí que sea importante, recordó, que la oposición pueda garantizar al chavismo que «tendrá vida política si sale del poder».