Guanare.- Cerca de 10.000 maestros del estado Portuguesa continúan en asamblea permanente desde el pasado 16 de septiembre. Se resisten a iniciar clases con un sueldo de 120.000 bolívares mensuales y con unas escuelas carentes hasta de agua potable por tuberías.
Desde esa fecha, día en que el Ministerio de Educación ordenó el inicio formal del nuevo año escolar, los maestros de la entidad han estado en la calle. En Guanare y Acarigua Araure, dos de las principales capitales urbanas, han hecho reuniones y protestas públicas contra la administración de Nicolás Maduro.
Este jueves y viernes 20 de septiembre concluyó en las plazas Boulevard San Roque y Concha Acústica la recolección de firmas de agremiados para sustentar el pliego de peticiones que introducen este mismo viernes 20 de septiembre al Ministerio del Trabajo.
Obdalis Castellanos, de la coalición sindical del magisterio, informa que no hay vuelta atrás. “El pliego de peticiones es el primer paso para blindar el decreto de paro regional indefinido : vienen luego el pliego de conciliación y el conflictivo”, dijo Castellanos.
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”El paro regional indefinido es un hecho. No hay indicios de que el Ministerio de Educación responda a nuestras exigencias de dignificación del salario y garantía de calidad de vida”, sostuvo Castellanos.
La dirigente gremial cuestionó que de bono especial de inicio de año escolar se les haya depositado la suma de 2.500 bolívares. ”Eso es un insulto y como tal lo rechazamos”, manifestó.
Ángel Galíndez, docente activo, asegura que, aunque la salida para mejorar la educación en Venezuela es política y de mediano plazo, es ” importante la protesta docente en la calle, pero esta requiere de la participación de los padres y representantes de los alumnos”.
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