Nataly Angulo, Mayreth Casanova, Eira González y Edwin Urdaneta
Colegios cerrados o aulas de clases vacías, así se inició el año escolar en el estado Zulia. El ausentismo de alumnos alcanzó 80 por ciento, según aseguró Marlene Antúnez, presidenta de la Federación Venezolana de Maestros en Zulia. Los maestros que asistieron a las escuelas reportaron que esta semana será de inscripciones y que estiman que la semana próxima inicien las clases.
El Pitazo constató en un recorrido hecho por las escuelas en Maracaibo que los prescolares de la Fundación del Niño Zuliano no abrieron sus puertas y escuelas como Joaquín Piña y Jorge Washington apenas recibieron seis alumnos que devolvieron.
“No hay ninguna escuela pública recibiendo niños, porque no hay condiciones laborales ni de infraestructura”, denunció Alexander Castro, coordinador de la Coalición Educativa en el Estado Zulia, quien junto con la FVM y el Sindicato Magisterial zuliano celebró una asamblea de maestros en protesta por las condiciones de trabajo.
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Omar Prieto, gobernador de Zulia, dijo este lunes 16 de septiembre que está garantizado que los niños retornen a los planteles con áreas adecuadas. Dijo que todos los estudiantes tendrán sus uniformes y morrales con útiles escolares.
Ausentismo en la Costa Oriental del Lago
Las escuelas en la Costa Oriental del Lago están desoladas, aunque las clases iniciaron, en cerca del 70% de las instituciones solo asistió el personal obrero, docente y administrativo. En las aulas no hay bulla ni emoción, el año escolar inició con fallas y apatía; los estudiantes están en casa.
En los municipios Cabimas, Lagunillas, Baralt, Santa Rita, Valmore Rodríguez, Simón Bolívar y Mirada, según reportes de la coalición sindical en la subregión, la asistencia fue menos del 10 por ciento en las instituciones públicas.
Jorlyana González, docente de primaria en la escuela Monseñor Guillermo Briñez, en Cabimas, comentó que de una matrícula de 30 alumnos en su clase, solo fue un niño. “El racionamiento eléctrico, la falta de dinero para comprar los útiles y hasta algo que enviar en la merienda, hay muchas situaciones que viven los padres que es cada vez más cuesta arriba”, explicó.
Para la maestra, quien trabaja en la institución desde hace 20 años, vaticina que este será un año difícil para los padres, los alumnos y la educación. “Quién va a querer ver clases sin luz, o cuándo no durmió. Los niños y sus papás están cansados, será difícil”.
Soledad en el Sur del Lago
En el Sur del Lago, a pesar del llamado a clases para este lunes 16 de septiembre, el silencio y la soledad daban impresión de un paro en las escuelas pese a que no hubo protesta. “No han pintado, están pidiendo colaboración para dar un retoque a las paredes y limpiar los baños”, dijo Ana Morelo, representante de Génesis, quien pasó para el quinto grado en la escuela Carmelita Roldán Portillo, en San Carlos de Zulia.
En esa escuela públicas los docentes y personal directivo se dedicaron a inscribir a los estudiantes. Sólo seis niños permanecieron en el patio. Las maestras atendían a los representantes. Ubicaban los expedientes en medio de aulas vacías. No había comida del programa alimentario y los obreros hacían un círculo en las áreas verdes. Se quejaban de la crisis y culpaban al gobierno por el retraso educativo.
“Dijeron en la radio que obligado tenían que empezar las clases y por lo que veo no pudieron arrancar”, contó Yoely Mora, madre de dos estudiantes en esa escuela ubicada en la capital del municipio Colón.
Sus representados aún no tienen uniformes ni la lista escolar completa. “Según y que van a dar morrales, pero esto es igual siempre prometen y no les dan nada”. En cerca de 100 instituciones públicas y privada en el municipio zuliano de Colón la afluencia mermó y estiman iniciar la próxima semana. En otras escuelas piensan dar clases en octubre si se mantiene una baja asistencia de cursantes.
En Guajira 30% de las escuelas abrieron sus puertas
Más del 70% de las instituciones educativas en la Guajira mantienen sus puertas cerradas. Los docentes manifestaron que la mayoría de los maestros han dejado sus cargos abandonados por el sueldo que reciben solo sirve para comprar un kilo de mortadela.
“Los docentes estamos sintiendo de una manera directa la crisis económica que nos azota. Si el presidente o el ministro de educación no se pronuncie al respecto creo que en la Guajira no va ver un inicio del año escolar”, destacó Carlos Fernández, docente de la escuela Fe y Alegría Ramón Paz Ipuana.
Angela Fernández, representante de Guajira, manifestó su preocupación por la educación de sus hijos: ” Es preocupante la situación , las escuelas no tienen maestros, carecen de infraestructura y sobre todo esta en riesgo la educación de cientos de niños de la Guajira”.
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