Falcón | Derrames petroleros en las costas han contaminado playas y alejado las especies marinas

Punto Fijo.- Los pueblos pesqueros del estado Falcón, al occidente de Venezuela, registran 12 derrames de petróleo en los últimos dos años, como consecuencia de las roturas de las tuberías que llevan suministro desde la refinería Bajo Grande en Zulia hasta el Complejo Refinador de Paraguaná (CRP), esto debido a la falta de mantenimiento preventivo a las tuberías submarinas que recorren el golfete de Coro y perjudican a al menos ocho pueblos pesqueros del occidente.

El 28 de junio, fue reportado por los pescadores un nuevo derrame, el cual sería el número 12 en los últimos dos años. Esta vez, está ubicado a un kilómetro de las costas de Tiguadare en la Península de Paraguaná. Este sector está conformado por 10 lanchas y 47 familias de pescadores directas que viven de la pesca artesanal. Según contaron a El Pitazo, fueron afectados en marzo de este año por un gran derrame en la misma tubería que llegó a la orilla de la bahía, por lo que perdieron la mayor producción del año.

Están seguros que debido a los derrames de crudo, la pesca ya no es la misma, anteriormente por estas fechas lograban de 50 a 80 kilos de jurel, actualmente deben ir al menos a tres kilómetros de la bahía para poder tener algo de alimento para sus hogares y llegan a tierra, luego de una noche de faena con apenas cinco kilos de pescado.

Aunque no son productores de camarones, como su pueblo vecino, Tacuato o Río Seco, que está al otro lado del estado Falcón, la captura de esta especie ha mermado por la misma situación, incluso, ya en la población de Tacuato, el petróleo se ha asentado en las arenas y esto acabó con la cría de camarones.

Antes de este nuevo bote de petróleo que recorrió al menos dos kilómetros de playa y que no ha sido reparado por Pdvsa, se localizó uno a un kilómetro de Río Seco que fue tapado 15 días después en un arduo trabajo que ejecutaron buzos de Pdvsa Zulia con apoyo de los pescadores de Punta Cardón. La reparación consiste en poner grapas de acero con goma espuma y sacos de arena para contener el bote, pero no se hace un saneamiento a las costas y el petróleo que ya había salido de la tubería queda asentado en las arenas, causando daño al ecosistema marino.

Los pescadores denuncian que pese a que se hacen los correctivos en las tuberías que datan de los años 1970, esto no es una solución a largo plazo, ya que al descubrirse un nuevo bote de crudo, la primera acción que toma Pdvsa es cerrar el suministro de crudo para evitar más daño, sin embargo una vez reparada la fuga, se vuelve a transferir y la presión causa una nueva fuga, ya que las tuberías ameritan cambios completos.

Los pescadores de la bahía de Tiguadare, explicaron a El Pitazo que se han hecho todas las diligencias para exigir a Pdvsa que se hagan correctivos que beneficien al colectivo y dejen de dañar el ecosistema marino, pero ellos en varias visitas que han hecho a la comunidad, informan que no cuentan con la inversión que se debe hacer para hacer la restitución de todo el sistema de Suministro Falcón- Zulia (Sufaz).

Al menos 1.468 pescadores forman parte de las organizaciones que hacen vida en el Golfete de Coro, hacía la Península de Paraguaná (Punta Cardón, Tiguadare, Cayude, Prudenico y Médano Blanco); los mismos que han tenido que adentrarse mucho más al mar para poder lograr un poco de especies; aseguran que hace unos cuantos no logran grandes cantidades.

Pdvsa solo se ha reunido con occidente

Por los pescadores de Río Seco, se conoció que Pdvsa occidente se ha reunido en varias oportunidades durante el mes de junio con los representantes de los consejos de pescadores del occidente de Falcón, pero no han sido tomados en cuenta los de la Península de Paraguaná.

Hasta la publicación de esta información, los pescadores de la Península de Paraguaná no habían recibido ninguna llamada por parte de Pdvsa en aras de atender sus necesidades; los mismos aseguran que es indispensable cambiar las tuberías del proyecto Sufaz porque en los últimos dos años se ha comprobado que están muy deterioradas y las reparaciones que hacen no son suficientes para evitar los derrames.

También creen que es indispensable crear un plan de beneficio para los pescadores y sus familias que son los que no dejaron trabajar durante la pandemia por la COVID-19; hacer limpiezas y mejoras al mar donde se han detectado los derrames de crudo para recuperar la biodiversidad marina y por último brindar planes de beneficios a los pescadores que están en las áreas cercanas a las refinerías, ya que han sufrido daños y pérdidas de lanchas, chinchorros y materiales que han dejado inoperativas al menos al 40% de las embarcaciones.