San Felipe.– Desde hace ocho meses el servicio de rayos X del Hospital Central de San Felipe Dr. Plácido Daniel Rodríguez Rivero, del estado Yaracuy, carece de material de acetato para hacer placas.
Esta situación ha perjudicado a incontables pacientes que acuden al centro asistencial con dolencias que requieran del servicio de imágenes.
Kimberlyn Fonseca, paciente, denunció la mañana de este 25 de agosto, que los responsables del servicio de rayos X exigen al usuario un teléfono inteligente (Android) para poder acceder al examen.
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«No todos los pacientes que acudimos al hospital contamos con un teléfono inteligente, por lo que esa opción nos parece excluyente», indicó.
Otros pacientes que tampoco fueron favorecidos con una placa resaltaron que cuando logran convencer al personal de rayos X de hacer el examen, a pesar de no contar con un teléfono con acceso a WhatsApp, los médicos de guardia se rehúsan a trasladarse al área para ver los resultados de la imagen tomada.
Poco material
Pocos son los centros asistenciales públicos que cuentan con el material de acetato para procesar exámenes de Rayos X.
Uno de esos centros médicos es el CDI «Wilfredo Conejero», ubicado en la urbanización La Ascención, cuyo material se destina para atender a pacientes confirmados con COVID-19 o sospechosos.
Trabajadores de ese CDI contaron al equipo reporteril de El Pitazo que muchos pacientes se disgustan porque el servicio se les niega.
«El paciente se enoja con nosotros por no prestarle el servicio, pero la orden que recibimos es atender a los potencialmente sospechosos del virus o los ya confirmados», dijo un empleado, quien prefirió no ser identificado.
Clínicas no cuentan con material
La falta de material no solo afecta a los centros asistenciales públicos sino también a los privados, que se encuentran en la misma situación hace cuatro meses.
En la clínica Yarasalud, ubicada en la Avenida La Patria con esquina de la avenida Cartagena en San Felipe, se ofrecen los servicios de mamografía, ecos y otros exámenes de imágenes en formato de CD-ROM, por los que el paciente también es desfavorecido porque los médicos no cuentan con equipos de computación para observar los resultados del examen aplicado.
Habitantes de San Felipe aprovecharon para exigir al Gobierno la dotación de los centros de salud y el levantamiento de las restricciones en los servicios de laboratorio, ginecología y cirugía.