Mercado de una semana cuesta 10 sueldos mínimos en Maturín

Maturín.- Comer en Maturín sigue siendo una necesidad que no todas las familias pueden cubrir tres veces al día. Es necesario recorrer entre seis y diez comercios buscando la economía y disponer de unos diez salarios mínimos o el equivalente a 1.200.000 bolívares para comprar los alimentos de, por lo menos, una semana, si el grupo lo conforman cinco personas, sin incluir niños.

Es el caso de Mildred Sifontes, una ama de casa con tres hijos, uno de ellos adolescente, su esposo es obrero de la Alcaldía de Maturín y ella cose vestidos, conjuntos, blusas y pantalones; en diciembre se resolvió y pudo garantizar la comida hasta los primeros cinco días de enero de 2020. “A mi esposo aún no le pagan en la alcaldía y lo poco que consiguió de trabajo extra lo destinamos a comprar comida, pero ya solo nos queda un paquete de harina pan y otro de arroz", expresó.

Este jueves, 9 de enero, salió a comprar pasta, carne y harina de maíz precocida, entre comparar precios se le fueron dos horas caminando. “Todo está caro, los comerciantes aprovecharon de subir los precios cuando el dólar aumentó y ahora que volvió a bajar, ellos dejaron esos precios así", mencionó al salir de un local asiático, ubicado en la calle Monagas de Maturín.

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Tras ojear en varios comercios, José Gregorio Duarte, albañil, armó una lista mental: un catón de huevos cuesta 260.000 bolívares, un kilo de carne Bs. 240.000, un kilo de pasta Bs. 99.950, uno de arroz Bs. 75.000, otro de harina de trigo Bs. 99.500, un paquete de azúcar 70.000 bolívares y el paquete de harina de maíz precocida en 68.000 bolívares. “Si quieres estirar el dinero debes caminar bastante", expresó.

Isabel Noriega, también ama de casa, contó que cada semana se recorre el mercado de Los Bloques y el mercado viejo para comprar los productos más económicos. El martes, 7 de enero, salió a su recorrido y notó que la mayoría de los establecimientos estaban cerrados, por lo que debió comprar en aquellos que estaban abiertos en el centro.

“No vi mucha variedad, así que ahora es lo mismo comprar en el mercado o en un supermercado, porque el valor de los productos está sujeto al del dólar. Lo malo de todo esto es que aquí no ganamos en dólares sino en bolívares, quienes estamos sufriendo somos nosotros, los que tenemos sueldo mínimo", dijo Noriega, quien es docente jubilada.

La maestra considera que el gobierno debe hacer un esfuerzo por sincerar las tablas salariales para que los profesionales puedan mejorar su poder adquisitivo. Mencionó que en su hogar se gastan hasta 1.500.000 bolívares a la semana para comer. “Mi hijo menor vive con nosotros y él se encarga de la carne y el pollo, así es como podemos comer", agregó.