EN
Maturín.- Los habitantes de comunidades aledañas a las estaciones de servicio en Maturín se quejan del foco de contaminación en el que se convirtieron las colas para surtir gasolina. En el sector Negro Primero, parroquia San Simón, los vecinos aseguraron a El Pitazo, vía telefónica este 9 de junio, que el distanciamiento social no se cumple desde el pasado 1° de junio, cuando entró en vigencia el nuevo plan de abastecimiento de combustible.
LEE TAMBIÉN
Luis Herrera, vecino, dijo que los conductores no usan tapabocas, algunos hombres se abrazan para saludarse y las mujeres que se conocen se saludan de abrazos y besos en la mejilla cuando se encuentran en las filas; “eso no está permitido, parece que a la gente se le olvidó que enfrentamos a un virus que ha matado a miles de personas en el mundo por el modo en el que se comportan cuando esperan que le surtan el vehículo con gasolina", consideró.
La estación de servicio donde los usuarios se surten está ubicada en la avenida Orinoco, a unas cinco cuadras largas desde la calle principal de Negro Primero, donde los residentes se quejan además de que la tranquilidad se acabó desde que comenzaron a surtir gasolina sin que haya orden.
Herrera refirió que hay otra cosa que afecta a los residentes: la bulla por la aglomeración de personas hasta altas horas de la noche, incluso de madrugada, y el humo al encender los vehículos para avanzar en la cola, que se mete a las casas afectando, especialmente, a los asmáticos de la comunidad. El vecino mencionó que la gente de la calle 1 es la más afectada, porque allí es donde se forman las filas.
LEE TAMBIÉN
Asamblea Nacional rechaza que TSJ pretenda nombrar rectores del #CNE
“Desde este martes (9 de junio) se están formando doble fila y ahora no hay paso ni vehicular ni peatonal, esto es algo que de continuar así nos afectará mucho más. Creo necesario que las autoridades gubernamentales tomen cartas en el asunto y que evalúen la forma más correcta de controlar la situación", indicó Mirna González, habitante de Negro Primero.
“Los fines de semana, las colas parecen un picnic porque las personas además de comer allí, que es lo lógico, arman sus parrandas y toman licor, lo que perjudica el sueño de los vecinos porque la gente escucha música a todo volumen", continuó la vecina, quien mostró su preocupación por el aumento de la delincuencia.
En esta comunidad, ubicada en una zona céntrica de Maturín, el lunes 8 de junio un conductor fue apuñalado por un delincuente que le quitó un teléfono celular. En el hecho también resultó herido una persona que intentó defenderlo y posteriormente, el delincuente que fue alcanzado por un grupo de conductores que lo golpeó tras evitar que huyera de la zona.
Sobre la pernocta en las estaciones de servicio, la gobernadora Yelitza Santaella ha insistido en su programa radial que no es necesario hacerlo, pero los usuarios hacen caso omiso porque aseguran que el combustible no es suficiente para surtir a todos los choferes. En un día, en Maturín se han atendido hasta siete mil conductores en las 35 estaciones de servicio que hay en la ciudad, según reportes de las autoridades gubernamentales.
DÉJANOS TU COMENTARIO