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Credit: Agencia EFE

Estados Unidos está llevando a cabo una apuesta arriesgada para presionar al gobernante venezolano Nicolás Maduro para que renuncie al poder a cambio de una amnistía, ya que surgen pruebas abrumadoras de que el hombre fuerte perdió las elecciones del mes pasado, dijeron personas familiarizadas con el asunto al medio estadounidense The Wall Street Journal.

Según lo publicado este domingo por dicho periódico, Estados Unidos ha discutido indultos para Maduro y sus principales lugartenientes que enfrentan acusaciones del Departamento de Justicia, de acuerdo con lo que le dijeron al medio tres personas familiarizadas con la deliberación de la administración Biden.

Una de las personas dijo que Estados Unidos ha puesto “todo sobre la mesa” para persuadir a Maduro de que se vaya antes de que termine su mandato en enero, asegura la publicación.

Agrega que otra persona familiarizada con las conversaciones dijo que Estados Unidos estaría abierto a brindar garantías de no perseguir a esas figuras del régimen para su extradición.

En 2020, Estados Unidos ofreció una recompensa de 15 millones de dólares por información que condujera al arresto de Maduro bajo cargos de conspirar con sus aliados para inundar Estados Unidos con cocaína.

Las conversaciones, según el artículo, representan un destello de esperanza para una oposición política venezolana que recogió meticulosamente los recuentos de votantes que mostraban que su candidato, el poco conocido exdiplomático Edmundo González, derrotó a Maduro de manera aplastante en las elecciones del 28 de julio.

En las últimas dos semanas, Maduro ha encarcelado a miles de disidentes, ha mantenido la lealtad de los militares y ha encargado a la Corte Suprema, repleta de aliados elegidos a dedo, que resuelva el impasse electoral, lo que le ha dado tiempo.

Según The Wall Street JournalMaduro ha dicho que está abierto a las conversaciones siempre y cuando Washington le muestre respeto. En otras ocasiones, le dice a Estados Unidos que se ocupe de sus propios asuntos. “No se metan con los asuntos internos de Venezuela, eso es todo lo que pido”, dijo Maduro en una conferencia de prensa el viernes.

Estados Unidos tiene cinco meses antes de la investidura presidencial de Venezuela para lograr un acuerdo y mucho depende del resultado de las elecciones presidenciales de noviembre.

Una victoria de Donald Trump podría sofocar las conversaciones si el expresidente revive sus anteriores políticas agresivas hacia Maduro, que comenzaron en 2019, cuando su administración impuso sanciones petroleras y apoyó a un gobierno venezolano en la sombra para derrocar al régimen, indica la publicación.

Aun así, Maduro desconfía de Washington, sin importar quién habite la Casa Blanca, dijeron personas familiarizadas con el sentimiento en la capital venezolana, Caracas. Esto incluye a la administración Biden, a pesar de que había levantado la mayoría de las sanciones económicas con la esperanza de promover una elección libre y justa en julio.

“Hasta ahora, las conversaciones se han llevado a cabo de manera virtual entre Jorge Rodríguezpresidente del Congreso de Venezuela y confidente de Maduro, y Daniel P. Erikson, quien dirige la política hacia Venezuela en el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. Los funcionarios estadounidenses han señalado que no obligarán a las compañías petroleras occidentales a abandonar Venezuela”, dice la publicación.

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Por su parte, Diario Las Américas difundió un escrito similar en el que replican la información ofrecida por el periodista Jaime Bayly, quien expone que “el 5 de noviembre es la fecha límite para negociar” debido a que esta, sería la fecha de los comicios presidenciales en Estados Unidos.

“Tienes que dejar el poder antes del 5 de noviembre; y sólo tienes dos opciones, o te vas al exilio o te vas a la cárcel”, es la decisión adoptada por EE. UU. respecto a Maduro, asegura Bayly en su mensaje grabado este 10 sábado de agosto, en el que expone que la conversación se habría dado entre Anthony Blinken, jefe de la diplomacia estadounidense, y representantes del Gobierno de Maduro.