Credit: Iván Reyes

El gobernante Nicolás Maduro dijo que los comanditos, agrupaciones ciudadanas de la oposición, son responsables de las protestas que se registraron este lunes, 29 de julio, y dijo que si cometen actos de violencia irían presos. 

“Estamos observando los hechos de violencia promovidos por la derecha extremista. Han hecho daño. Este guión lo conocemos para el golpe de estado de 2002, la guarimba 2014, la de 2017”, dijo Maduro al inicio de su alocución desde el Palacio de Miraflores.

Más adelante el gobernante denunció y mostró videos de personas que derribaron estatuas del fallecido Hugo Chávez y del indio Coromoto y quemaron algunos edificios o vehículos en diferentes zonas del país. 

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“Quemaron la sede del CNE en Coro, quemaron material electoral, quemaron vehículos. El muchacho que hizo esto fue capturado y estaba drogado, muchos estaban drogados y aunque entraron encapuchados, se les cayeron las capuchas. Luego no vengan a decir que son presos políticos”, afirmó Maduro en referencia un video que mostró durante su alocución. 

Maduro reconoció las protestas en el país y reiteró que “desde antes” sabían el plan orquestado por la oposición para después del 28 de julio. 

“Hicieron todo lo posible por crear un escenario violento para cortar los servicios públicos. Ayer atacaron dos puntos estratégicos en dos zonas del país para provocar un apagón. Dos veces, a las 12 del mediodía y a las 8 de la noche”, enfatizó. 

Según el relato de Maduro, la oposición pretendía presentarse a las elecciones presidenciales y utilizar el camino electoral para derrocar a su gobierno e instalar un gobierno fascista. “Esta es la orden que dieron ayer, gritar fraude y promover la violencia electoral. A todos los que cometan actos de violencia contra la cultura venezolana serán juzgados con todo el peso de la ley”, aseveró. 

El gobernante y número 1 del chavismo confirmó que hay 6 funcionarios entre militares y policiales heridos por golpes y armas de fuego. Además hay un funcionario de la contraloría herido de bala. 

Llama a la movilización

Durante la transmisión desde el palacio de Miraflores, Maduro llamó a los chavistas a movilizarse para proteger la paz. 

“Vamos a apertrecharnos de paciencia porque está película la conocemos. Hemos sido testigos de ataques violentos, criminales y terroristas. Hemos capturado a varias personas, gracias a los videos, muchas de estas personas las hemos capturados”, pidió. 

El gobernante solicitó a los simpatizantes del chavismo ir hasta el palacio presidencial para proteger la paz. 

“La paz la vamos a defender en la calle. Estoy resteado con la paz y con el pueblo cuidando la paz. Llamo al pueblo a la movilización, a la defensa de la paz en cada calle y a la denuncia. Uno a uno estos comanditos irán a donde tienen que ir: a la cárcel”, sostuvo. 

Poco después le dio la palabra al número 2 del chavismo, Diosdado Cabello, quien informó que los seguidores del chavismo están convocados a participar en una movilización desde Petare hasta Miraflores que se realizará el martes 30 de julio. 

Cabello informó que ya en el palacio de gobierno hay un grupo de chavistas que llegaron a acompañarlo y que están desplegados. 

“A partir de este momento, en el palacio de Miraflores hay un grupo de ciudadanos que están defendiendo el palacio de Miraflores. Mañana vamos a tener una gran movilización en Caracas, con los motorizados, a partir de las 2 de la tarde”, precisó. 

La ultraderecha y Estados Unidos le quieren dar un golpe de Estado

Maduro insistió en la versión de que las protestas que tuvieron lugar el lunes en diferentes zonas del país están orquestadas por la ultraderecha y por los Estados Unidos. 

“Detrás de este plan están los gringos, siempre han estado. Este plan lo vinieron trabajando ellos. Quieren usar el proceso electoral para desestabilizar a Venezuela y hacerle daño a usted”, añadió sin presentar pruebas. 

El gobernante afirmó que la mayoría de las personas identificadas y capturadas —a partir de los videos que circularon en redes sociales— son personas que estaban drogadas, armadas, que recientemente habían vuelto de Estados Unidos deportadas y que recibieron pagos de 150$ por día por ejercer acciones violentas.

El dirigente chavista aseguró que todos los que derribaron estatuas de Chávez y otros símbolos nacionales serán apresados y juzgados. 

Nuevamente, responsabilizó a los comanditos de los hechos y dijo que la oposición los había articulado para que cometieran acciones violentas. 

“Todos fueron integrados a los comanditos, todos forman parte de los comanditos. El narcotráfico metió mucha plata en todo esto. Plata y droga. Llamo a la más poderosa reacción de repudio hecha por los delincuentes de los comanditos. Aquí va a haber justicia”, comentó. 

Maduro confirmó que se reunió este lunes con el representante de Lula, Celso Amorim, a quien le dijo, entre otras cosas, que aunque en Venezuela “hay varias oposiciones”, la oposición que está actuando ahora es “fascista y criminal”. 

“Nosotros le hemos dicho a la militancia que no caigan en provocaciones. Yo he evitado un baño de sangre en Venezuela y lo voy a seguir evitando. La revolución bolivariana es la garantía de paz”, sentenció

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