Vuelos de deportación panamá
Todavía no están claros los criterios de deportación. Foto referencial

El pasado martes 20 de agosto, Panamá dio inicio a la política de vuelos de deportación de migrantes que cruzaron por la selva del Darién y no tenían permisos de tránsito. Los vuelos, financiados por Estados Unidos, representan la ofensiva del nuevo gobierno panameño en el tema de la migración, como ya lo había anunciado el presidente José Raúl Mulino. 

Aunque el presidente panameño anunció, en primer instancia, que los vuelos de deportación serían desde Panamá hasta Colombia, luego se conoció que habrá vuelos a Ecuador, India y China. Los últimos dos llamaron la atención puesto que son destinos bastante lejanos y, por ende, los vuelos son más costosos. 

Carolina Jiménez Sandoval, presidenta de la Oficina de Washinton para Asuntos de Latinoamérica (Wola, por sus siglas en inglés), explicó que estos vuelos de repatriación todavía no tienen las reglas del todo claras. “No sabemos cuales son los criterios para elegir a quienes deportarán, por más que los gobiernos dicen que cumplen con las normas internacionales. En este tipo de deportaciones grupales raras veces se cumplen normas de debido proceso”, dijo Jiménez Sandoval a Efecto Cocuyo. 

La razón para deportar a las personas desde Panamá a Colombia es porque desde este país es que se hace la entrada hacia la selva del Darién. Sin embargo, si la medida se extiende hasta Ecuador también podrían evaluarse otros destinos dentro del continente. En 2023 cruzaron la selva del Darién unas 520.000 personas, la mayoría venezolanas

Los vuelos de deportación hacia Colombia no son sólo para colombianos

Una de las principales críticas que hace la presidenta de Wola es que Colombia ha dicho que los vuelos de deportación entre ambos países son rutinarios. Sin embargo, Jiménez Sandoval explica que Colombia no mencionó dos puntos importantes: estos vuelos son financiados por el gobierno de Estados Unidos y que no serán deportados hacia colombia únicamente ciudadanos colombianos. 

Es decir, si una persona venezolana salió desde alguna ciudad criolla hacia Colombia y, luego, ingresó a la selva del Darién, su deportación sería hacia Colombia y no hacia Venezuela. 

“Ya vimos que aterrizó un vuelo en Medellín. Ese tenía migrantes con antecedentes penales, pero no han dicho si esos serán los criterios. Siempre preocupa cuando se dan estos procesos de deportación masivos porque puede que no se hagan identificaciones necesarias para saber si, dentro de estos grupos deportados, hay personas vulnerables que requieran protección”, explicó Carolina Jiménez Sandoval. 

El presidente panameño ha presentado la política migratoria como una de sus grandes banderas y, de hecho, buena parte de su campaña se basó en una idea de cerrar la selva del Darién. Aunque no explicó cómo sería esto posible, el mandatario panameño insiste en que tomará control de la zona. 

Las críticas principales sobre estos vuelos de deportación también apuntan hacia una agenda política electoral. “No podemos olvidar que estos vuelos están siendo pagados por el gobierno de Estados Unidos. Esta medida se toma de cara a las elecciones en noviembre en ese país donde el tema migratorio es muy importante y, donde ambos partidos, quieren demostrar que tienen una posición fuerte sobre el tema”, analizó Jiménez Sandoval en conversación con Efecto Cocuyo. 

“Enfocarse en procesos de deportación rápida puede tener algunos efectos inmediatos, pero eso no detiene la migración forzada”, enfatizó la presidenta de Wola.