La ministra del Servicio Penitenciario de Venezuela, Celsa Bautista, informó este domingo sobre el desalojo de la población del Centro de Formación para Hombres Nuevos Simón Bolívar, una cárcel ubicada en Caracas, destinada a la reclusión de extranjeros.
A través de la red social X, la funcionaria detalló que los internos fueron trasladados a «distintos establecimientos en las regiones del país, de acuerdo a su situación jurídica», aunque no especificó los nombres de los lugares a donde fueron enviados los presos, ni cuántos de ellos permanecían en el lugar.
La ministra explicó que en los espacios del centro penitenciario se habilitará una «unidad técnica de orientación y supervisión», que atenderá a egresados y exconvictos con «beneficios del sistema penal».
Se desconoce el censo
Asimismo, informó que el Gobierno activará «áreas de oficios» textiles, de panadería y mecánica automotriz en el lugar, «con mano de obra de egresados del sistema penal».
Según una nota del Ministerio para el Servicio Penitenciario de 2017, este centro fue acondicionado para albergar a «152 privados de libertad extranjeros, en condición de procesados», si bien se desconoce el censo que manejaba el lugar en la actualidad, así como las nacionalidades de los internos.
«Este espacio será únicamente para visitas consulares a los privados de libertad, para garantizar que la población caraqueña esté tranquila y segura», dijo ese año Mirelys Contreras, aquel entonces titular de la cartera.
El centro era conocido anteriormente como “La Planta”. Al momento de su inauguración, albergaba a 57 extranjeros recluidos.
Familiares de presos político que permanecían en esas instalaciones denunciaron este 2 de junio que los detenidos fueron enviados a otros espacios de forma arbitraria, entre ellos a la cárcel de El Rodeo I, que ha sido denunciada por defensores en Venezuela por no cumplir con las condiciones adecuadas que garanticen los derechos humanos de quienes son trasladados allí.