Panel de Expertos y Centro Carter observaron de cerca las elecciones

Tanto el Centro Carter como el Panel de Expertos Electorales de la ONU han coincidido en sus recientes informes que las elecciones presidenciales de Venezuela no fueron transparentes y en que la proclamación como presidente de Nicolás Maduro como ganador se realizó sin sustento.

Aunque Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de 2020, cuestiona ahora la presencia de estos observadores internacionales en elecciones venezolanas, lo cierto es que fue el propio Consejo Nacional Electoral quien los invitó, bajo el visto bueno del chavismo.

¿Qué dijeron ambas instituciones, reconocidas internacionalmente como especialistas en este tipo de procesos políticos? Te lo resumimos:

Este martes 13 de agosto, la secretaría general de las Naciones Unidas publicó un informe, en el que se concluye que el proceso electoral del 28 de julio no cumplió con “los requisitos básicos de transparencia e integridad” y que el anuncio de su resultado no fue tabulado ni detallado, lo cual “no tiene precedente en elecciones democráticas contemporáneas”.

Por su parte, el Centro Carter concluyó en un reporte preliminar que la elección no podía considerarse democrática ni se adecuó a parámetros y estándares internacionales de integridad electoral.

Ambas instituciones coinciden además en la necesidad de que el CNE haga públicos los resultados pormenorizados, así como de las actas que los sustentan. Asimismo, cuestionan la intervención del Tribunal Supremo de Justicia en la resolución de esta crisis política.

Qué se puede concluir de ambos informes del Centro Carter y Panel de Expertos

Víctor Maldonado, politólogo y profesor universitario, indica que ambos informes se suman a “una exigencia universal” de que el Consejo Nacional Electoral demuestre sus afirmaciones con un resultado desglosado y verificado.

“Ya no es suficiente decirlo, sino que también deben honrar el debido proceso que exige mostrar los resultados de las actas y permitir el arqueo de esas actas por parte de los candidatos que participaron”, asegura en conversación con la Voz de América.

En Venezuela, agrega Maldonado, existe “una crisis muy compleja de legitimidad interna y externa” que solo se puede resolver si el CNE completa su trabajo. «Mientras el CNE no concluya el proceso detallando sus resultados y comprobando la proclamación de Maduro, prevalece una situación de hecho que disuelve cualquier ilusión de democracia”.

Por su parte, el politólogo Piero Trepiccione coincide que en los informes del Centro Carter y el Panel de Expertos nacen de organismos con un prestigio internacional labrado durante décadas.

“Son dos elementos importantísimos de análisis que van a soportar las valoraciones de las agencias diplomáticas internacionales sobre la elección», dijo.

Trepiccione, directivo del centro de pensamiento Gumilla, afirma que los informes serán elementos de primera línea en las gestiones diplomáticas de México, Brasil y Colombia para mediar en la crisis poselectoral en Venezuela, tanto como en las posturas que asumirán “muchos países” en cuanto a los cuestionamientos del proceso comicial.

La reacción gubernamental

Las conclusiones provocaron la ira de las autoridades venezolanas, quienes desde su Cancillería tildaron a ambos organismos internacionales de “agentes” del gobierno de Estados Unidos y “falsos expertos”. Además, revelan que desde Miraflores se espiaba las comunicaciones del panel de expertos durante su estancia en Venezuela y que detectaron llamadas al Departamento de Estado.

Un equipo de cuatro expertos enviado por el secretario general de la ONU, António Guterres, estuvo en Caracas durante más de un mes en el periodo previo a las elecciones del 28 de julio. Fueron uno de los pocos observadores externos independientes invitados por el gobierno de Maduro.

Aunque el grupo de la ONU elogió la organización logística de la votación, criticó duramente al CNE por no acatar la normativa electoral venezolana y anunciar a Maduro como ganador sin mostrar los resultados de cada una de las 30.000 casillas de votación en todo el país, algo que, según dijo, “no tenía precedentes en las elecciones democráticas contemporáneas”.

“Esto tuvo un impacto negativo en la confianza en el resultado anunciado por el CNE entre una gran parte del electorado venezolano”, dijeron los expertos.