Sábete, Sancho, que no es un hombre más que otro, si no hace más que otro. Todas estas borrascas que nos suceden son señales de que presto ha de serenar el tiempo y han de sucedernos bien las cosas, porque no es posible que el mal ni el bien sean durables, y de aquí se sigue que, habiendo durado mucho el mal, el bien está ya cerca
Miguel de Cervantes el Quijote.
Cuentan los griegos, que al Hermano de Prometeo el malintencionado dios Zeus le regalo a la primera mujer moral, Pandora y junto a ella un cofre con la advertencia de que jamás lo abriera, obviamente la curiosidad le ganó a esta hermosa creatura de níveos brazos y abrió aquel cofre, del cual salieron todos los males, vicios y perversiones que laceran a los humanos, aterrada la joven Pandora, cerró la caja y adentro dejó a la esperanza condenada al olvido.
Dicen los filósofos, que la esperanza es una medida del miedo, ante ese razonamiento válido por demás, solo nos queda aceptarlo como verdadero, más cuando en la praxis del ejercicio de vivir, nos encontramos envueltos en el terror y el miedo, que sólo nos dejan a la esperanza como única acción para continuar la vida, en estos mustios años, los más sucios de nuestra historia republicana, hemos visto triunfar una y otra vez a los vicios sobre la virtud, así perdimos el país, en estos aciagos momentos, al fin tenemos quizás movidos por el miedo esa posibilidad de embridar la esperanza, incardinarla a nuestra cotidianidad, para que nuestro país resucite, obviamente siendo otro distinto a la imagen que todos anhelamos de Venezuela, pero que contemos con la decencia, la justicia y las virtudes cardinales para dejar de ser una excusa de país y convertirnos en una sociedad sólida, tangible y libre.
Ahora la otra acera, la butaca del poder, esa poltrona tapizada de bayonetas, también tiene miedo, miedo de los sin poder, miedo de los pobres hacia quienes siempre mostró su enfado, su repulsa, eso que llaman aporofobia, el régimen persigue a humildes mujeres quienes se ganan el pan amasando esperanzas y friéndolas en ese aceite, que es la vida del pobre, cierra posadas y hoteles, encarcela a un canoero, por llevar a María Corina Machado y la esperanza de ser libres, demostrando que el miedo es un sentimiento extremo como la ira que les es tan natural.
Todas las discriminaciones afectan a este régimen, es aporofóbico, misógino, edadista, homófobo e iracundo, tan torpe proceder lo lleva a atentar contra quienes otrora fueron sus seguidores y base popular, el gran hermano está perdiendo influencia, sus dádivas son un insulto al hambre, sus bonos una afrenta al trabajo y los efectos de años de conducción corrupta esa factura que crece día a día, la cual cobraremos el 28 de julio, justo allí reside su miedo.
En materia económica siguen aplazados, la macroeconomía aplicada es una asignatura, no cursada por sus ministros, en minúsculas exprofeso, quienes son incapaces de contener las fallas de base, con un Banco Central devenido en armazón de concreto, incapaz de lograr estabilidad cambiaria, empeñado en una praxis insostenible de adjudicaciones cambiarias, que mantienen la brecha en dos dígitos, como son dos las décadas de su torpeza en el poder, la esperanza amigos lectores, estriba en que ahora más que nunca no soltemos la toalla, mantengamos la resistencia y votemos movidos por la esperanza y tal vez por el miedo, por un cambio, es el momento de las transiciones, el momento de que hombres y mujeres, de la sociedad decente nos representen, es la hora de los sin poder, de las humildes mujeres de las empanadas, de los hosteleros, de los canoeros que se ganan la vida con el trabajo.
Finalmente estas líneas van para la excusa que tenemos de presidente, quien se hace ver como un obrero y atenta contra el trabajo de los humildes para llevar el pan, los años en el poder tal vez le borraron los agobios de sus tiempos de chofer de autobús y de sindicalista, ahora el vicio del poder total le atormenta, le corrompe y le angustia, tampoco es un gobierno de obreros, menos de izquierda, es una tiranía cleptócrata, deforme y pletórica de cacocracia deleznable, la esperanza nos corresponde meterla en las urnas electorales y escuchar en todos los rincones de la tierra las notas del ¡ Gloria al Bravo pueblo que el yugo lanzo!.
X @carlosnanezr
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