Luego de 48 horas de tensión, las fuerzas policiales de Nicolás Maduro cesaron el asedio que mantuvieron a la embajada de Argentina en Caracas, según confirmaron este domingo las personas que se mantienen dentro de estas instalaciones.
Estas personas indicaron que los funcionarios encapuchados que rodeaban la sede desde el viernes se retiraron del lugar y que se restituyó el servicio eléctrico de la sede diplomática.
Eso alivia en algo la angustiosa situación de los seis venezolanos asilados del gobierno de Milei, al tiempo que crecen las versiones de que la «“sorpresiva” salida a España del Edmundo González Urrutia está íntimamente relacionada al asedio de la residencia argentina«, afirma el diario argentino Clarín.
Este domingo, al volver cierta calma a la residencia argentina en Caracas, que se encuentra a cargo de Brasil desde que Maduro expulsó a todos los diplomáticos de este país en represalia por las posiciones de Javier Milei, se comenzó a especular a nivel oficial que el asedio fue una maniobra de distracción internacional mientras se negociaba el refugio que Pedro Sánchez le dio a González Urrutia.
Mediante un comunicado de la Cancillería, el gobierno de Maduro justificó la revocatoria de la custodia de Brasil sobre la Embajada de Argentina por supuestos planes para atentar contra la vida del gobernante venezolano y de la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez que desde el recinto se estarían gestando. Brasil respondió que no abandonará la prerrogativa hasta que no se designe a un tercer país con el que estén de acuerdo Argentina y Venezuela.