Con pancartas y vestidos de morado, los vecinos de Los Mangos de La Parroquia La Vega levantaron su voz de rechazo, por la muerte de la adolescente Arianna Jocxybel Parra Oliveros, de 16 años de edad, presuntamente asesinada por su ex novio Francisco Saltrón, de 20 años. La comunidad exigió justicia al fiscal general Tarek William Saab. La comunidad repudió la violencia de género en cualquiera de sus manifestaciones.
Caracas. Habitantes de La Vega protestaron hoy 15 de mayo, por el asesinato de la adolescente Arianna Jocxybel Parra Oliveros, de 16 años de edad, ocurrido el pasado 13 de mayo. La adolescente fue asesinada presuntamente por su ex novio Francisco Saltrón, de 20 años de edad, quien la habría atacado con un arma blanca, delante de la hermana menor de la víctima, de apenas 7 años de edad. Saltrón le habría propinado 10 puñaladas a la joven dentro de su propia casa.
La comunidad de Los Mangos en la parroquia La Vega, indignada organizó un protesta y tomó las calles para menifestarse y exigir justicia por este feminicidio. “Quieren que caiga todo el peso de la ley sobre el asesino de la joven”. Durante la protesta se cerró el paso vehicular a la altura de la redoma de La India.
Decenas de personas de la comunidad expresaron su impotencia y su tristeza durante la caminata en la que llevaban pancartas donde pedían la actuación inmediata del fiscal general Tarek William Saab.
Se podía leer en las pancartas: “ni una más”, “queremos justicia”.
Los participantes de la protesta entre los que había hombres, mujeres y niños usaron prendas de vestir moradas para expresar repudio a la violencia de género.
Arianna Jocxybel Parra Oliveros, de 16 años de edad, era bachiller y promesa del voleibol y familiares y vecinos la recuerdan “como una niña con un futuro inmenso, deportista… y con un talento inmenso de expresión y vocación de ayudar y apoyar”.
La violencia en cifras
Según el Observatorio Digital de Femicidios en los primeros 7 días del mes de mayo se registraron ocho asesinatos consumados. De esos casos, dos eran adolescentes y una niña menor de dos años, es decir, una cada 21 horas.
Participa en la conversación