El equipo dirigido por el argentino Ricardo Valiño, encontró en Ecuador la fórmula para ser un equipo competitivo, que, hasta ahora, no ha deslucido en ningún partido del Suramericano.
Caracas. La Vinotinto Sub-17 no tuvo la mejor preparación ni el mejor clima previo al Suramericano, pero en el clasificatorio encontró la fórmula para ser una selección competitiva y obtener el ansiado boleto al Mundial.
El equipo del argentino Ricardo Valiño, venció 2-0 el jueves a Paraguay en la penúltima fecha de la fase final para llegar a seis puntos y asegurar el último cupo de la zona para la Copa del Mundo de este año, con sede todavía por definir. Brasil, Argentina y Ecuador son los otros tres clasificados de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol).
Valiño llegó al banquillo Vinotinto apenas el 14 de marzo para sustituir a su compatriota Damián Ayude, quien dirigió al grupo entre junio y diciembre de 2022, pero dio un paso al costado por supuestos impagos, lo que dejó al plantel a la deriva hasta la llegada del nuevo entrenador, unos 15 días del inicio de la competencia.
Con la renuncia de Ayude, la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) tardó en encontrar un sustituto, en parte, debido a la crisis en la selección de mayores que derivó en la salida del seleccionador José Pékerman, el manager de selecciones Pascual Lezcano y el técnico Sub-20, Fabricio Coloccini.
Ante la eventualidad, el preparador físico- también argentino y hoy coordinador del combinado- Cristian “Tato” Palandella decidió quedarse en el país y se trasladó el 4 de marzo al Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Margarita, en el que la selección estaba concentrada para tomar las riendas del equipo mientras llegaba el nuevo cuerpo técnico. “No puedo dejar guindados a estos muchachos”, señaló en su momento.
Se ganaron el respeto
Valiño potenció al grupo en la parte mental y, según aseguró, sus primeras palabras fueron “nosotros no somos menos que nadie y en la cancha nos van a tener que respetar”. Y en Ecuador, la Vinotinto se ganó ese respeto en base a buen fútbol, personalidad y el talento de David Martínez, uno de los mejores jugadores del torneo.
Venezuela debutó con caída 4-2 contra Argentina, pero después fue creciendo. Empató 1-1 con Paraguay, venció a Bolivia 2-0 y empató sin goles con Perú. En el hexagonal final puso en aprietos a Brasil y Argentina antes de caer 2-1 en ambos compromisos. Las victorias 2-0 contra Chile y Paraguay aseguraron la segunda clasificación mundialista de la categoría en 10 años.
“Agradezco a la Federación que nos apoyó y por sobre todas las cosas a Palandella que se presentó con los jugadores el 4 de marzo y allí empezó esta historia que termina con Venezuela clasificada. Estoy emocionado y feliz. Cuando dimos la lista en Margarita les dijimos que no veníamos de paseo y el sueño que tenían los muchachos se hizo realidad”, señaló el seleccionador Sub-17.
La Vinotinto Sub-17 cierra el domingo su participación en el Suramericano en el choque contra Ecuador a las 5:00 p.m, con posibilidades de llegar al podio del certamen.
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