La película seguro será una de las favoritas en la temporada de premios, pero su trama es carente de emoción y sentido.

Caracas. La segunda parte de la adaptación de Wicked al cine es un éxito. Wicked: Por siempre es un atractivo en salas que conmueve a una parte importante del público. 

El largometraje está centrado en las brujas de Oz. Ahí están, Elphaba (Cynthia Erivo)  y Glinda (Ariana Grande) mientras atraviesan momentos de cuestionamiento interno. Decisiones que deberán tomar para forjar su futuro. Todo mientras se recrudece la aversión hacía la Bruja Mala del Oeste, como conocen popularmente a Elphaba. 

Sin embargo, esta segunda parte es una obra que busca maravillar con la simulación de un mundo de ensueño, mágico y trascendental, pero en realidad no va más allá en el respeto a los personajes y sus recorridos.

Si bien Wicked: Por siempre se propone presentar una reflexión sobre las apariencias, la mentira, el poder y objetivos de vida, la película en realidad nunca desarrolla los motivos de sus personajes.

Wicked: Por siempre
Wicked: Por siempre está disponible en la cartelera venezolana

Hay dos aceras, por un lado Glinda es amada por el reino, mientras se amolda perfectamente a lo que esperan de ella. Y en ese objetivo, tiene un proceder moralmente cuestionable. Mientras tanto, Elphaba sobrevive al estigma de ser una figura despiadada.

Esa es la premisa que hay que asumir para comprender la trama, pero hasta ahí. La película dirigida por Jon M. Chu es una sucesión de hechos sin mayor justificación o sentido, Por ejemplo, hay escenas en las que Elphaba busca destruir el famoso camino amarillo, pero no hay mayor detalle sobre las razones.

Y es que las dos brujas tienen cambios constantes de comportamiento sin mayor razón. Glinda un día puede ser parte de una componenda atroz, y luego seguir su vida de buena como si nada, para luego ser perdonada por  Elphaba. Como una obsesión por desaparecer la figura del villano a como dé lugar.

Y a la figura que se supone es la malvada, El mago de Oz (Jeff Goldblum), no le otorgan mayores razones para su vileza y capacidad manipuladora; claro, de una manera independiente a lo visto en la primera.. Es malo porque sí. 

Wicked: Por siempre
Wicked: Por siempre es una de las películas con más entusiastas en el público

Y al carecer Wicked: Por siempre de una profundidad en la personalidad de sus personajes, no le queda otra opción que refugiarse en una trama amorosa simplona de reencuentros y desamores, pero también manejada de una manera superficial, toda una telenovela de novato escritor, como esas que ponían en la televisión abierta en horarios de poca demanda, pero con gran presupuesto.

Aunado todo esto a un CGI que enrarece el contexto de los personajes, unos ambientes poco virtuosos y para nada convincentes en su búsqueda de deslumbramiento. No es lo artificial que te invita, como aquellos tiempos del tecnicolor, sino lo artificial que te sumerge en la duda. 

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