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Combustión y falta de inversión estadal provocan pérdida de 20.000 toneladas de caña en el estado Sucre

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La deuda que el Gobierno del estado Sucre mantiene con los cañicultores ya supera los 740 millones de dólares. Aseguran que la zafra correspondiente a 2022 está prácticamente perdida ante la inoperatividad de los centrales azucareros.

Cumaná. Más de 20.000 toneladas de caña de azúcar, correspondientes a la zafra 2022, están prácticamente perdidas en el municipio Montes del estado Sucre, por falta de producción en el Central Azucarero de la localidad.

Edgar Palomo, cañicultor y transportista, sostuvo que al menos 10.000 toneladas de caña se han perdido producto de la combustión provocada por manos inescrupulosas que quieren sacar provecho del rubro. 

“Quemar la caña es pura maldad, es gente inescrupulosa que quiere terminar de acabar con los productores y sus familias”, dijo Palomo.

Los cañicultores han denunciado públicamente la deuda que mantiene la Gobernación del estado Sucre, a través de la Corporación Socialista (Corposucre), en alianza con la empresa Tecnoagro y, con ello, exigen la cancelación de 285.000 dólares, correspondientes al arrime de 21.600 toneladas de caña de azúcar de la campaña 2021.

La zafra 2022 se perdió y la deuda ya supera los 740 millones de dólares debido a la devaluación”, indicó Palomo.

El periodo de producción que tradicionalmente empezaba en los tres primeros meses del año no vio luz en esta ocasión. 

No hubo zafra porque el Gobierno no reparó el Central Azucarero, no entregó créditos, es decir, no nos han ofrecido algún incentivo que nos permita paliar la delicada situación”, aseveró el productor.

Aseguró que tampoco se cumplieron las pretensiones oficiales de importar el producto para refinarlo crudo en la factoría de la jurisdicción montesina, porque las calderas están dañadas.

“Eso es lo que quería el Gobierno, importar producto crudo para refinarlo aquí, pero ni eso pudieron lograr”, apuntó. 

Sin alternativas

A comienzos del año, los productores tenían la alternativa de arrimar caña en los trapiches, pero hay tres en la zona que también se dañaron y sale muy costoso el transporte hasta sectores como Varadero o Limonal. 

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Cañicultores indicaron que además de la paralización de los centrales azucareros, manos inescrupulosas queman las siembras. Foto: Cortesía

En medio de este panorama, los cañicultores buscan alternativas en la economía informal para sobrevivir a la crisis que golpea a los habitantes del municipio Montes, cuya economía dependía de la productividad del central azucarero.

Cañicultores y hasta los trabajadores del central azucarero han buscado otras opciones para paliar la crisis, como trabajar en autolavados, vender café en el mercado e, incluso, algunos compañeros viven del trueque porque la caña era lo que movía la economía”, detalló.

No solo población que habita en el municipio Montes se ha empobrecido totalmente y sufre porque la dinámica económica dependía de la producción de azúcar, sino que también la tradición del procesamiento de caña y extracción de azúcar se ha perdido en el municipio Ribero. El estado Sucre cuenta con dos centrales azucareros y ambos están paralizados por falta de estímulo productivo. 

Alrededor de 402 productores están afectados por la inoperatividad de los centrales azucareros, porque incluso, hay cañicultores del municipio Mejía que no cuentan con recursos para mantener a sus familias.

Agricultores insisten 

Los productores del Valle de San Bonifacio se mantienen en pie de lucha, pese a las limitaciones y también han sido afectados por las lluvias registradas en los últimos días. 

Por ello, llamaron la atención de las autoridades para que les garanticen la maquinaria que les permita canalizar el cauce del río Juan Antonio y evitar la inundación de por lo menos 1000 hectáreas de caña de azúcar.

Miguel Vásquez, legislador del estado Sucre, sostuvo que los cañicultores exigen que en el presupuesto 2023, el Gobierno les garantice maquinaria como un jumbo, un patrol y material de relleno para atender nueve kilómetros de vialidad.

Solo en este caso, los agricultores cuentan con 800 hectáreas de caña, 300.000 matas de ocumo chino, yuca y chaco, entre otros.


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