Al menos tres especies, entre ellas leones, dromedarios y walabíes, llegaron al Zoológico de Caricuao recientemente como parte de la recuperación del parque. Sin embargo, los cuidadores no tienen los uniformes adecuados y solo ganan salario mínimo, sin beneficios.
Caracas. Un nuevo león se exhibe desde hace una semana en una de las jaulas del Zoológico de Caricuao, al suroeste de Caracas. Es pequeño, blanco y aún no tiene una gran melena formada alrededor de su cara. Llegó a Venezuela, junto con otro león, desde República Checa. Pero por los momentos solo uno está en exhibición. Mientras los otros dos están en período de revisiones médicas.
El mandatario Nicolás Maduro informó sobre la llegada de cuatro leones, en total, a finales de mayo. También mencionó la presunta llegada de jirafas, linces y elefantes, aunque no dio fecha. Estas incorporaciones representan una nueva etapa de recuperación del Zoológico de Caricuao y el Parque Generalísimo Francisco de Miranda, conocido como Parque del Este.
Más animales nuevos
Desde hace algunas semanas en el zoológico de Caricuao también se exhibe un grupo de walabíes, comúnmente confundidos con canguros, y aunque de igual forma son nativos de Australia, estos son más pequeños y de diversos colores.
Los walabíes llegaron a Venezuela provenientes de un zoológico que cerró en España, contó uno de los cuidadores de animales del zoológico a Crónica.Uno.
Para estos siete walabíes fueron habilitadas nuevas áreas con espacios propios para cada uno, mas un área verde en donde todos comparten.
También dos grandes dromedarios (o camellos arábigos) son nuevos en el zoológico de Caricuao y se encuentran en la zona de contacto junto con los burros, cerdos, conejos y ovejas.
A Caricuao también han llegado animales de zoológicos del interior del país, como una de las dantas, proveniente de Barquisimeto, esta Lara.
Mantenimiento y alimentación
En 2018, durante una visita de Crónica.Uno, las 36 hectáreas de áreas verdes del Zoológico de Caricuao lucían secas. Ese año murió la elefanta Ruperta, que ya había sufrido varias caídas y tenía su cuerpo bastante delgado.
Previamente, en 2016, los trabajadores del parque encontraron al caballo del zoológico descuartizado.
Pero las cosas han cambiado, sobre todo luego de la reapertura de los parques, tras el confinamiento decretado por la pandemia de la COVID-19.
En un recorrido de Crónica.Uno, en el 1° de junio, el verde del pasto se veía más vivo y hay árboles en plena época de florecer. Todo ambientado con los sonidos peculiares de algunos animales. El detalle está en que en varias zonas el monte está más alto de lo adecuado.
Diariamente, entre 10:00 a. m. y 12:00 p. m., los animales del parque son alimentados con dietas y porciones adecuadas para cada especie.
En cada cesta, sobre la comida de los herbívoros, hay un polvo marrón que se trata de una especie de sal marina con vitaminas, que les hace bien a los animales, según uno de los zoo-cuidadores.
Trabajadores con dotación incorrecta
“Ruperta solo comía auyama”, comentó Marlene Sifontes, secretaria de organización del sindicato de Inparques (Sunep-Inparques), quien aplaude los trabajos de mantenimiento y mejoras de atención a los animales que se realizan desde hace varios meses en el zoológico de Caricuao. Sin embargo, mantiene su denuncia acerca del mal estado en el que trabajan los obreros y cuidadores de animales.
“Los trabajadores de Inparques no están bien. El personal obrero, vigilante y cuidadores de fauna no reciben la dotación correcta y de calidad para trabajar desde el 2088. Ellos necesitan la ropa y los equipos adecuados para trabajar”, explicó.
Los implementos que necesitan los trabajadores dentro de los zoológicos tienen que estar adecuados al tipo de fauna con la que trabajan. Por ejemplo, quienes están directamente con las aves deben contar con franelas de material grueso.
“En las exhibiciones pueden ser picoteados por las aves, por eso las franelas deben ser de material grueso, no como las que cargan que son de una tela muy fina y desgastadas de tantos años”.
Este tipo de trabajadores también necesitan sombreros que les cuiden los oídos, lentes y botas especiales para limpiar las exhibiciones y protegerse de hongos o bacterias.
En el Zoológico de Caricuao son 14 zoo-cuidadores. La mayoría jóvenes, que viven en zonas cercanas, y con pocos meses de trabajo dentro de Inparques.
Su salario es un sueldo mínimo (130 bolívares) y con beneficios intermitentes de bolsas de comida. Además, aproximadamente desde hace un mes, están suspendidos los pagos de horas extras por una presunta decisión de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre), explicó Sifontes.
—“Me gusta mi trabajo porque es relajante trabajar con animales, pero no por la paga”.
—“Yo lo hago porque me gustan mucho los animales”.
Salud de los animales
Los zoo-cuidadores de Caricuao explicaron que entre las mejoras que se están implementando en el parque también está incluida la salud veterinaria de los animales.
“Todos los días el veterinario pasa y pregunta si hay alguna novedad con alguno de los animales”, contaron.
Sin embargo, desde el Sunep-Inparques han denunciado la muerte de animales, tanto en el Zoológico de Caricuao, como en el Parque del Este, debido a enfermedades como salmonella y newcastle, un virus altamente contagioso que ataca a las aves.
Las visitas al zoológico
“Cada vez viene más gente”, comentó a Cronica.Uno, una de las zoo-cuidadoras. Casi a mediodía empiezan a llegar cada vez más visitantes al Zoológico de Caricuao, sobre todo padres con hijos pequeños, pero también adultos paseando con familiares o parejas.
Es la primera vez que Daniel, un niño de apenas cuatro años de edad, visita el parque con Carolina, su mamá, quien aprovechó que el pequeño faltó al preescolar para darle un pequeño recorrido por el parque.
Lo que más llamó la atención de Daniel fueron los monos que saltaban entre los árboles y robaban la comida de los loros. En gran parte del recorrido extendía uno de sus brazos y señalaba a los animales, asombrado.
“Ellos no se acercan a robar la comida de las guacamayas porque esas sí son bravas”, comentó una zoo-cuidadora.
José Alberto también aprovechó un tiempo libre del trabajo para pasear un rato con su mamá.
“Estamos apurados, pero por lo poco que vimos está mucho mejor que hace dos años que todo esto estaba pelado”, comentó José Alberto sobre su visita anterior.
Horarios del zoológico
Los fines de semana el zoológico está abierto hasta las 4:00 p. m. Estos son los días con más visitas, mientras que de martes a viernes el horario es hasta las 3:00 p. m.
Sobre el costo de la entrada, los niños menores de 12 años no pagan entrada. El resto debe cancelar 2,5 bolívares por boleto.
Está prohibido entrar al parque con juguetes, pues en 2015 murió la hipopótamo Safari debido a complicaciones por haber ingerido dos pelotas de goma, reseñó el portal Runrunes.
“Pareciera que la gente viene cada vez más estúpida”, dijo la zoo-cuidadora sobre el comportamiento de los visitantes adultos, que sin ninguna justificación muchas veces lanzan objetos hacia los animales y algunos terminan heridos.
“Los fines de semana viene demasiada gente y los animales están como aturdidos, las aves empiezan a gritar con mucha fuerza”, describió.
Traslado de león al zoológico de Maracay
Uno de los tres leones que llegó al Zoológico de Caricuao será trasladado al Parque Zoológico Las Delicias en Maracay, estado Aragua, contó Sinfontes a Crónica.Uno.
El traslado –refiere Sifontes– sería en julio y se desconoce si en esa fecha reabren el zoológico.
“La información que tienen los compañeros del zoológico de Caricuao es que uno de los leones va al zoológico de Maracay”.
El Parque Zoológico de Maracay se encuentra cerrado desde el 2015, cuando el entonces gobernador de Aragua, Tareck El Aissami, decidió remodelar este parque de la era gomecista que ya cumplió 100 años.
Los trabajos siguen sin culminar, pese a que los sucesores de El Aissami, Caryl Berto y Rodolfo Marco Torres, prometieron en su momento la culminación de las obras.
Promesas incumplidas al zoológico de Aragua
La promesa de restaurar, remodelar y ampliar el Parque Zoológico de Maracay para reabrirlo durante su centenario, previsto en diciembre del 2015, fue otra de las tantas ofertas incumplidas de El Aissami.
El 10 de julio del 2015, El Aissami presentó, en el marco del quinto objetivo del Plan de la Patria 2019-2025, un ambicioso proyecto para ser ejecutado en un año. Una primera etapa que se culminaría en cinco meses, justo en el marco de la celebración de los 100 años de este emblemático espacio.
En abril del 2016, El Aissami informó que Aragua suscribió convenios con la república de Cuba para el intercambio de especies que estarán en el zoológico de Maracay.
A casi seis años del cierre del zoológico de Maracay, la promesa de rescatar estas 5000 hectáreas, hábitat de especies silvestres y exóticas, muchas muertas y otras cuyo destino se desconoce, ha quedado reducida a tímidos avances que le costaron al erario público hasta el 2020, más de 6000 millones de bolívares.
La actual gobernadora de Aragua, Karina Carpio, prometió en marzo la reapertura del zoológico de Maracay. Según nota de prensa oficial, los trabajos de remodelación tienen 60 % de avance.
“Estamos haciendo las últimas remodelaciones para su reinauguración en los próximos meses”, anunció a mediados de marzo, el ministro para el Ecosocialismo, Josué Lorca, en una visita que realizó a este centenario zoológico.
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