Emilio Hernández, uno de los miembros del grupo de académicos que auditó el sistema de votación del CNE, aseguró que cumple con todas las garantías de seguridad que se requieren y que está entre los mejores del mundo, y lo calificó de “joya”.
Caracas. Tras seis semanas llevando a cabo el proceso de auditoría integral al sistema automatizado de votación del Consejo Nacional Electoral (CNE), el grupo de académicos que realizó este proceso desde el pasado 14 de julio aseguró que concluyó con la demostración de que, efectivamente, el sistema es uno de los mejores del mundo y que cumple con todos los requisitos para una votación segura.
En una rueda de prensa, el doctor en Ciencias de la Computación de la Universidad de Southampton Emilio Hernández afirmó que durante las jornadas lograron analizar cada uno de los componentes del sistema de votación y llegaron a la conclusión de que es ampliamente seguro. En su declaración a los medios, añadió que el sistema cuenta con una serie de garantías para evitar vulnerabilidades por parte de terceros, o problemas de funcionamiento.
Dijo que el sistema de Venezuela “es desde el punto de vista computacional una joya, es un gran sistema”, y agregó que es el “más completo y seguro del mundo”.
El sistema cumple con los objetivos de escrutinio preciso y de la manera más rápida posible, además de otros objetivos, como la privacidad del votante y la no suplantación de identidad en un grado altísimo, casi del 100%”, manifestó Hernández.
El académico añadió que durante las jornadas descubrieron que no solo el software sino también el hardware, así como la plataforma física y de transmisión tienen un “sobredimensionamiento de los sistemas de seguridad”, lo que imposibilita que pueda ser vulnerado o atacado de alguna forma. El doctor en computación explicó esto con el siguiente ejemplo: “Si para parar un proyectil se necesita un vidrio blindado, en todo el sistema no hay uno solo, hay tres vidrios blindados”.
En relación con las garantías de la propia auditoría, Hernández resaltó lo positivo de que este proceso inédito, en duración y profundidad, se haya hecho no solo antes de la campaña electoral, sino incluso antes de que se conozcan quiénes son los candidatos que aspirarán a un cargo el próximo 21-N en las elecciones que organizará el CNE.
Por su parte, Robinson Rivas, magíster en Ciencias de la Computación de la Universidad Simón Bolívar y actual director de la Escuela de Computación de la Universidad Central de Venezuela, comentó que a lo largo del proceso se hicieron varias recomendaciones, algunas de las cuales ya han sido implementadas por el CNE, que permitirán mejorar un sistema que ya consideran “robusto”.
En el transcurso de la auditoría hicimos una serie de comentarios, y la respuesta es que tomaban nota los técnicos del CNE; algunos cambios se pudieron hacer en el momento, otros requerían un trabajo más complejo de certificación de software. Algunos de los cambios que recomendamos sí confirmamos que se hicieron”, dijo Rivas.
En cuanto a la seguridad del software, Rivas destacó que cuenta con un “hash”, una firma digital que compila todo el código y lo traduce en una firma. Explicó que si se hace un pequeño cambio al código del software, por mínimo que sea, esto cambiaría la firma del “hash”, por lo cual, lo único que debe hacerse para corroborar que se trata del mismo código es verificar que el “hash” coincida con el que saldrá en el informe final de la auditoría.
Rivas agregó que, aunque la auditoría integral ya puede darse por culminada, no es la única que se aplicará al sistema, y que ahora viene una segunda auditoría que se hará con los representantes de los partidos. “Nosotros esperamos que usen nuestro informe final con recomendaciones como un insumo para la de ellos; de igual forma, estamos abiertos para cualquier invitación que el CNE o ellos mismos nos hagan para sumarnos también a ese proceso”, comentó.
Participa en la conversación