Ventas
Tienda en el centro de Valencia exhibe mercancía en remate. Fotografía: Armando Díaz.

El auge de la disparidad cambiaria ha obligado a negocios en Valencia a vender su mercancía a pérdida. Aunque han surgido opciones de financiamiento alternativo, el combo de sanciones y apagones asfixia a los comerciantes y reduce las ganancias al mínimo, en los mejores casos, alertó la Cámara de Comercio de Valencia.

Valencia. La amplia brecha cambiaria entre el tipo de cambio oficial del Banco Central de Venezuela y el dólar paralelo ha afectado la economía carabobeña y perjudicado las ventas.

Ernesto Abbas, presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, expresó su preocupación ante esta situación y calculó una caída de entre 25 % y 30 % en las ventas durante el primer trimestre del año en la capital del estado Carabobo.

Aunque la institución aún recaba datos oficiales, Abbas basa su proyección en el comportamiento observado en los negocios y en diálogos constantes con sus agremiados.

El dirigente destacó que la disparidad cambiaria ha erosionado las ventas, al obligar a muchos comercios a vender sus productos por debajo del valor real. “Eso hace que se tengan grandes pérdidas”.

Además, criticó la falta de créditos bancarios, que dificulta la reposición de inventarios y la continuidad productiva. Mientras el Banco Central fija el dólar en 82,37 bolívares, el mercado paralelo lo cotiza en 103 bolívares por dólar.

“El Banco Central tiene que buscar estabilizar estos valores a como lo teníamos hace un año que era de un 1 % o 3% de diferencia”,

sugirió Abbas.

Deber del BCV

Ecoanalítica proyecta que, para fines de 2025, la presión cambiaria aumentará, lo que elevaría la brecha por encima del 20 % y complicaría aún más las ventas.

Pero este descenso se ha acrecentado. “Estos tres meses han sido peores que los últimos tres de 2024, y el año anterior fue peor que el de 2023”.

El declive ha provocado el cierre de numerosos negocios, aunque la Cámara no maneja cifras exactas. Contrariamente, Abbas destacó que, pese a la crisis, han surgido nuevos emprendimientos, como ferreterías y tiendas de reparación.

A esto se le añade que en medio de la crisis varios empresarios han decidido invertir en negocios como restaurantes, y tiendas que obedecen a targets muy específicos. “En frente del restaurante Charlotte abrió una tienda para decorar el hogar. Eso te habla que hay un interés en un sector de la sociedad en cubrir estas necesidades”.

No obstante, Gonzalo Peña, experto en la escena cultural de Valencia, advirtió en entrevistas previas con Crónica Uno que muchos locales, especialmente restaurantes, tienen una vida útil promedio de dos años, extendiéndose a cinco en casos excepcionales.

Apps salvadoras

Mantenerse a flote es un desafío, pero algunos comerciantes han recurrido a aplicaciones como Cashea, que ofrece créditos en cuotas. Incluso, cadenas como Multimax (Credimax) y Total Calzados (Creditotal) han creado sus propios sistemas de financiamiento.

Abbas se refiere a aplicaciones como Cashea que ofrecen créditos por cuotas en donde el solicitante debe pagar de forma puntual para adquirir productos. Estas alternativas al crédito han sido una salvación para muchos negocios. 

Tanto así, que hay negocios que inclusive han creado sus propios mecanismos de crédito, como el caso de la tienda de línea blanca Multimax (Credimax) y la tienda de calzados Total (Creditotal). 

“La venta por abono ha vuelto como un reflejo de la necesidad de facilitar al comprador la posibilidad de adquirir bienes”.

No convence a todos

Sin embargo, Cashea no convence a todos. Un recorrido por Valencia reveló que pequeños comercios y tiendas como Tijerazo o Mango Bajito no la usan. Abbas aclaró que la aplicación exige ventas mínimas de $150; de lo contrario, impone cargos adicionales.

“Un local que no tiene suficiente capacidad para generar ingresos no te va a colocar Cashea por eso farmacias, supermercados y algunos restaurantes sí lo hacen”.

Abbas recalca que la base de estos sistemas es la credibilidad y la posibilidad para muchos de obtener beneficios por cuotas. Aunque estos mecanismos alivian la crisis, Abbas señaló que el gobierno los ve con recelo.

“Le tienen miedo al sistema crediticio porque para ellos si hay alto consumo eso se puede traducir en inflación. Puede ser verdad y puede ocurrir, pero va a haber más ingresos para todo el mundo. Entonces eso se equipara”.

Sanciones y cortes

Las sanciones internacionales también agravan la situación, a juicio del presidente de la Cámara de Comercio de Valencia. “Que se le diga a las empresas que explotan hidrocarburos que ya no lo pueden hacer nos obliga a ir al mercado negro. Entonces pierdes 50 % de su valor, pero trabajas igual, y recibes menos”.

Los frecuentes apagones son otro obstáculo. “Afectan de forma significativa”, dice mientras recomienda a los comerciantes reducir el consumo energético, aunque admitió que el problema raíz es la falta de inversión en la red eléctrica.

Más allá, las fallas en el servicio eléctrico, atribuidas por expertos a la falta de inversión en el sistema nacional de generación, no parecen resolverse con simples ajustes al consumo.

Muchos negocios deben asumir el costo extra de plantas a gasoil, lo que encarece sus operaciones.

La debilidad adquisitiva 

Los salarios siguen siendo insuficientes: en marzo, un venezolano promedio gastó $105 solo en alimentos, según según la ONG Centro de Documentación y Análisis de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM).

Estas cifras contrastan con las declaraciones ofrecidas en enero por la vicepresidenta Delcy Rodríguez, quien destacó supuestos avances económicos, durante un evento transmitido por medios oficiales.

“Hay buenas noticias productivas, que se está demostrando en el esfuerzo del sector público y privado para seguir avanzando en un objetivo común. Es la felicidad social del pueblo venezolano haber garantizado, poder mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y lo dijo el presidente el año 2025 será de defensa del poder adquisitivo de los trabajadores”, aseguró la funcionaria.

No obstante, la realidad refleja una brecha entre los anuncios oficiales y las condiciones económicas que enfrentan los ciudadanos.

Lea también:

Remuneraciones caen en el primer trimestre de 2025 según cifras del OVF

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.