Los estudios de la OPS también advierten que se ha encontrado que algunos productos que se ofertan como libres de nicotina (SESN) sí contienen la sustancia.
Caracas. El Ministerio de Salud prohibió la fabricación, almacenamiento, distribución, circulación, comercialización, importación, exportación, uso, consumo, publicidad, promoción y patrocinio de vapers o productos de sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN), con o sin nicotina (SSSN) o implementos similares, según la Gaceta Oficial N° 42.682, con fecha del 1° de agosto.
La Gaceta también explica que las instituciones del Estado, asimismo los propietarios, empleados y administradores de establecimientos comerciales, locales, instituciones, áreas privadas y/o públicas, cualquiera sea su oso, incluyendo transporte público, tienen la obligación de velar por el cumplimiento de lo establecido.
Desde mayo pasado, la administración de Nicolás Maduro emitió a alertas sobre el uso de los también llamados vapeadores. La primera incluyó el anuncio de las regulaciones sobre la venta, uso y la publicidad de estos productos. A partir de entonces, Maduro asomó la posibilidad de prohibir su venta de forma general.
El proceso de regulación del vaper en Venezuela comenzó en 2021, cuando en la Gaceta Oficial N° 42.096, el Ministerio de Salud ordenó el inicio de un proceso de consulta pública para la regulación de la importación, exportación, distribución, comercialización, uso, publicidad y promoción de estos dispositivos.
Qué deben hacer los establecimientos
Los establecimientos anteriormente mencionados deben presentar “de manera permanente un anuncio público cuyas dimensiones sean iguales o mayores a 80 centímetros de ancho y 50 centímetros de largo” con el siguiente texto:
“Está prohibido el expendio o facilitar de cualquier forma al público en general los sistemas electrónicos de administración de nicotina (SEAN), sistemas electrónicos similares sin nicotina, consumibles, depósitos o cartuchos, envases de consumibles, depósitos o cartuchos, envases de consumibles de recarga y demás accesorios, productos de tabaco calentado convencionales (PCT convencionales y herbales), y productos análogos. Quien venda, suministre o entregue productos que puedan causar dependencia física o química, será sancionado y penado de acuerdo a la legislación, resoluciones y normativas vigentes”.
Las razones del Ministerio de Salud
Una nota publicada en el portal oficial del Ministerio de Salud explica que esta decisión está sustentada en “estudios y ensayos clínicos de médicos y científicos realizados en el país, que han llegado a la conclusión que los (SEAN) y los (SSSN), contienen sustancias totalmente tóxicas que causan adicción y son nocivos para la salud, aumentan el riesgo de enfermedades cardiacas, trastornos pulmonares, entre otras patologías”.
La información científica que presuntamente maneja el Ministerio de Salud indica que los aerosoles generados por los PTC, convencionales y herbales, además de presentar glicerina y propilenglicol, contienen otras sustancias tóxicas que se encuentran en niveles más altos que en el humo originado del tabaco en combustión, como el glicidol, la piridina, el trisulfuro de dimetilo, la acetoína y el metilglioxal, que no están presentes en el humo de los cigarrillos convencionales.
Qué dice la OPS
Una de las teorías urbanas sobre el cigarrillo electrónico o vaper es que, presuntamente, ayuda a las personas a dejar la dependencia del cigarro tradicional. Pero en 2021 la Organización Panamericana de la Salud (OPS) desmintió esta versión. Ese año la OPS destacó que no hay estudios que comprueben que los cigarrillos electrónicos sirvan para dejar de fumar.
Los llamados líquidos electrónicos, según la OPS, pueden o no contener nicotina (pero no tabaco), aunque también suelen contener aditivos, sabores y productos químicos que pueden ser tóxicos para la salud de las personas”.
Los estudios de la OPS también advierten que se ha encontrado que algunos productos que se ofertan como libres nicotina (SESN), en realidad sí contienen la adictiva sustancia. “Las emisiones de los cigarrillos electrónicos generalmente contienen nicotina y otras sustancias tóxicas que son nocivas tanto para los usuarios como para los no usuarios que están expuestos a los aerosoles ajenos”.
Según la organización Global Tobacco Control, hasta diciembre de 2022 hay al menos 107 países u otras jurisdicciones que regulan o prohíben los cigarrillos electrónicos.
Contexto sobre el tema
Venezuela se convirtió en el séptimo país de la región de las Américas y el número 49 en el mundo en cumplir con la reglamentación de la prohibición total de publicidad, promoción y patrocinio de tabaco, enmarcado en los acuerdos del Convenio Marco de Control de Tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Además, en Venezuela se prohíbe el consumo de tabaco en espacios cerrados. La medida implica que los locales deben contar con un anuncio que indique que son un espacio libre de humo.
En otros países, como Colombia, la regulación de estos dispositivos comenzó en 2016, cuando los clasificaron como productos de tabaco y prohibieron su uso en lugares públicos cerrados. La ley también exige que los fabricantes y distribuidores de vaper obtengan un registro sanitario y cumplan con requisitos de etiquetado y publicidad.
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