Nicolás Maduro, en el ojo del huracán después de las cuestionadas elecciones presidenciales del pasado 28 de julio, pidió al PSUV ganar todas las gobernaciones en los comicios pautados para 2025.
Caracas. El mandatario Nicolás Maduro instó este lunes, 19 de agosto, a los jerarcas del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) a trabajar desde ya para que el chavismo gane todas las gobernaciones y al menos 300 de las 335 alcaldías del país en los comicios previstos para 2025, en medio de la crisis política que se abrió tras los resultados de los comicios presidenciales del pasado 28 de julio.
“Vamos con la meta de ganar 23 estados en las elecciones de 2025, los 23 estados”, dijo Maduro durante un encuentro con representantes del PSUV y de la alianza de partidos chavistas Gran Polo Patriótico.
“Y por lo menos 300 alcaldías”, agregó luego el mandatario socialista, en el poder desde 2013.
Tras la petición, Maduro reconoció que la meta “es grande” pero necesaria, en vista de que el chavismo es, según afirmó, “la más grande garantía de paz” para Venezuela.
Cuestionadas elecciones
La petición de Maduro ocurre tres semanas después de las elecciones presidenciales en las que, de acuerdo con los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral (CNE), el antiguo sindicalista y conductor de autobús resultó reelecto para un tercer sexenio consecutivo.
Tras el anuncio del CNE, la oposición mayoritaria, que acudió a las elecciones con el exdiplomático Edmundo González como abanderado, no reconoció los resultados y denunció un presunto fraude.
Días después, los opositores colgaron en internet copias de más de 80 % de las actas del día de la votación, que certifican el presunto triunfo de González con una amplísima ventaja poco vista en la vida democrática de Venezuela.
Con todo, el propio Maduro desestimó estas actas, que consideró “chimbas” y la Fiscalía abrió una investigación contra los responsables de la publicación de los documentos.
La estrategia de Maduro
En su intento por atajar la crisis, Maduro introdujo ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) un recurso para que el ente revise todos los procesos de las elecciones y “dirima” la controversia.
Pero la oposición mayoritaria rechazó este proceso y Edmundo González ni siquiera se presentó ante el TSJ, tras señalar que no corresponde a este tribunal dar explicaciones sobre los comicios, sino al TSJ.
Esta misma jornada, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, el español Josep Borrell, rechazó la gestión del TSJ sobre las elecciones.
“No sé qué va a emitir como sentencia porque su función no es contar los resultados electorales”, dijo Borrell, al tiempo que alertó que “si no hay verificación de los resultados, los resultados (del 28 de julio) no pueden ser aceptados”.
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