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En 2023 la laguna que bordea a la comunidad indígena del oeste de Anzoátegui se desbordó, y afectó a varios residentes del caserío. Alcaldía de Píritu olvidó realizar la canalización de la albufera.

Píritu. La celebración por el Día del Padre 2023 en la comunidad indígena de Pozo Hondo, del municipio Píritu al oeste de Anzoátegui, terminó en angustia para los pobladores de dicha zona. La laguna que la bordea se desbordó y derivó en la pérdida de cosechas y enseres para buena parte de sus habitantes.

“En 25 años que tengo viviendo aquí, nunca había visto que esto pasara, esto se desbordó por todos lados, prácticamente quedamos rodeados por el agua. Todo eso se inundó”. Así resumió la señora Martha Chanchamire, aquel momento de junio de 2024.

Pozo Hondo es una comunidad pequeña de pobladores indígenas, con una larga calle que aún en pleno siglo XXI, no conoce lo que es el asfalto y en algunos tramos, los bordes de la laguna sirven como basureros improvisados. 

Para quienes residen en Pozo Hondo, la realización de esa carretera, que conduce hacia otras comunidades, derivó en un tapón del desagüe natural de la laguna el cual propició un incrementó súbito en su nivel. 

A simple vista, la laguna no reviste algún peligro de desbordarse debido a lo alto del paso hacia las otras comunidades de Pozo Hondo. Sin embargo, el 18 de junio de 2023, la laguna, como dicen los pobladores, reclamó su cauce y se elevó más de cinco metros de su nivel natural. 

Según los pobladores, en la comunidad se encuentran dos lagunas que en época de lluvia  son alimentadas por varias quebradas y riachuelos. Indicaron que al momento de la emergencia, la alcaldía de Píritu prometió darles solución pero todo quedó en eso, promesas. 

Tres días después del evento, trabajadores de la alcaldía de Píritu trasladaron hasta el caserío, dos tubos de concreto de 24 pulgadas para optimizar el drenaje de la laguna y evitar nuevos desbordes.

pozo hondo
Hace un año la Alcaldía de Píritu prometió unos trabajos de canalización que nunca hizo. Foto: José Alberto Camacho.

Vecinos recientemente celebraron el primer año de los tubos que desde que fueron llevados a la zona, se quedaron en el mismo lugar en que fueron dejados y la optimización del drenaje nunca se ejecutó.

La alcaldía vino y dejó esos tubos, ellos dijeron que querían hacer un desagüe para que los carros pasaran y los otros sectores no quedaran incomunicados, pero nunca regresaron”, contó Chanchamire.

Más de lo normal

Elvira Figuera tiene un sitio turístico en la comunidad de Pozo Hondo, cerca del lugar y uno de los portones que dan acceso al mismo, sucumbieron a la presión del agua y terminaron arrasados por la corriente de la laguna.

Había unas personas aquí y tuvieron que irse después de las 12 de noche, yo tengo más de 20 años aquí y esa laguna nunca se había desbordado, aquí vino Protección Civil al día siguiente pero no pasó más nada, ellos solo vinieron a ver si no hubo heridos o algo más”, contó.

Aura Canache, también reside en la comunidad y cuenta que no es primera vez que sufren por el desbordamiento de la laguna. En su cuenta ha visto el embalse salirse en tres ocasiones, pero la de 2023 fue la más fuerte.

Pozo Hondo
Foto: José Alberto Camacho

“Varios vecinos resultaron afectados, un caserío que llaman La Rinconera también padeció. A mí me llevó una siembra pequeña de maíz. Uno está aquí a la buena de Dios, esperando que la laguna se desborde nuevamente porque nunca le metieron mano al asunto”, dijo Canache a Crónica.Uno. 

Idalia Canache contó a Crónica.Uno que el agua entró hasta su casa, pudo salvar sus enseres pero insiste en hacer el llamado a las autoridades para que terminar de canalizar la laguna y evitar un nuevo desborde. 

“Ellos dicen que no se puede pero eso es mentira, si hacen el trabajo, el agua va a buscar su cauce natural”, dijo.


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